viernes, 9 de agosto de 2013

Norte-Sur




Quizá porque soy atlántica tengo un humor diferente. Nuestros mares definen cómo son nuestras mareas, las que nos mecen por dentro y a veces nos dejan a la zozobra. Quizá por eso me cueste entender, o compartir, tu sentido del humor, tan de otros mares.

Quizá porque el sol que me calienta es el de otra estación (vistes primavera cuando me arropa el otoño) o porque tu norte es mi sur, tengo un carácter diferente. Nuestras pieles se calientan en tiempos opuestos y los vientos nos peinan la raya en distinto lado.

Quizá porque soy la noche y tú el día tenemos tiempos diferentes. La Luna que me alumbra es la que vela tu sueño, cuando estoy lúcida tú bostezas y el cansancio en mis ojos coincide con tu euforia. Quizá por eso nos resulta difícil hallar el punto de encuentro.


Quizá porque somos tan distintos nuestro amor es un milagro.

19 comentarios:

  1. ¡ALIS!

    ¡Qué bonito! ¡Qué alegría volver a ver que escribes!

    Necesito leerte. No tardes tanto. Inventa, escribe, como aquellas historias que me engancharon a ti.
    Por favor.

    Un millón de besos, amiga.

    ResponderEliminar
  2. Alis:

    ¡Qué gusto volver a leerte!. Me alegra que retornes al ruedo bloggero...Y si amiga, es curioso como el amor logra unir lo que aparenta tan disperso y diferente. Allí radica el goce extremo, en los opuestos/complementarios.

    Besitos y ¡Bienvenida seas!

    ResponderEliminar

  3. Bueno ...me encantó !

    Llegado a la frase final, una estrofa de una antigua canción apareció de la nada y no dejé de tararearla los segundos hasta encontrar su origen : Te doy una canción de madrugada,cuando más quiero tu luz. Te doy una canción cuando apareces
    el misterio del amor,
    y si no lo apareces no me importa: yo te doy una canción...
    El misterio del amor, amiga mía, cuando no siendo ciego, vence las zancadillas de la razón.

    Un beso y un aplauso.

    ResponderEliminar
  4. Esas diferencias acentúan el amor. Si en verdad existe, será poderoso, habrá, pues que disfrutarlo, con el impulso del viento y las olas, vengan de donde vengan.
    Un abrazo bien grande, me alegra mucho leerte.

    ResponderEliminar
  5. Yo soy mediterránea, tal vez por eso, escondido entre las cañas llevo mi primer amor, lleno de luz y color, por dondequiera que vaya...

    Un saludo!;)

    ResponderEliminar
  6. Bienvenida!. Bellísimo texto. Y sí. A veces el amor es un milagro.

    Beso grande

    ResponderEliminar
  7. a veces esas diferencias es lo que nos une más...milagros en equilibrios...

    bss

    ResponderEliminar
  8. No sabía que eras de la Atlántida. Cuantas historias tendrás para contar.
    Es cierto, los orientales tienen otro sentido del humor, pero con un poco de buena voluntad, tendrán un amor milagroso.

    besos para las cuatro

    ResponderEliminar
  9. Yo creo que no hay Norte
    sin el Sur,
    se complementan.


    Querida Alís
    es una alegría
    hallarte de nuevo.

    Biquiños desde este Atántico

    ResponderEliminar
  10. Pero existe...está dentro de ti.
    Me alegro mucho verte donde Toro Salvaje, por eso he venido aquí.
    Cariños para ti
    mar

    ResponderEliminar
  11. Que alegría tu visita en mi caleta bloguera, que agradable leer la sutileza de tus escritos...Recibe un gran abrazo fraterno del pacífico.

    ResponderEliminar
  12. Alis, Qué bueno!!!
    Qué alegría verte de nuevo, linda.
    Norte, sur, este u oeste, si es quien te mueve el piso, no le busques sentido alguno.
    Besos!!!

    ResponderEliminar
  13. Alís, el amor siempre es un milagro.

    besos.

    ResponderEliminar
  14. Alis,

    Tú tampoco sabes la suerte que yo he tenído con la oportunidad de no perderte de vista. Han pasado, no lo sé con certeza, casí tres años, de silencio... ese comentario es un absoluto regalo para mi.

    Muchas gracias y otro enorme abrazo y, un millón de besos.

    ResponderEliminar
  15. Hola Alís,
    El amor es un milagro y así ha de ser.
    Lo de ser del norte o del sur es solo circunstancial, las barreras que levantan los políticos y los gobiernos, o quien sea, no pueden contener el deseo de la gente de vivir con dignidad y con amor. Y a diario lo vemos con la inmigración que es capaz de cruzar el estrecho de Gibraltar en balsas hinchables de juguete.
    Besos

    ResponderEliminar
  16. La noche y el día, la luna y el sol, el blanco y el negro... se necesitan, se complementan.

    Y el amor, qué maravilla...

    ResponderEliminar
  17. Bonitas palabras en todo lo que representa.

    Saludos.

    ResponderEliminar