jueves, 11 de diciembre de 2014

La traición de los ojos azules




- Dios mío! No me había fijado. ¡Tienes los ojos azules!

En cuanto escuchó esa frase, después de dos años casi viéndose a diario, supo que él ya no le gustaba.

Lo supo porque lo primero que pensó fue: “¿Será que ya no me dilata la pupila?”.

13 comentarios:

  1. Caray,que´bueno. ¿y cómo ze iba a dilatar zi a la mirada (que no la vizta) le falta algo tan fundamental como ez el eztímulo ? Fiziología y emocionez. Zi ez que van de la mano, Alíz, eztán eztrechamente interconectadaz... Bezo

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  2. En mi caso es la carne de gallina. Si un beso en el cuello no hace que se me erice la piel... Va siendo hora de decir adios.

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  3. Dos años tirados por la borda.
    Que desperdicio...

    Besos.

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  4. Que sería de nós se perdemos quen nos dilate...

    Por certo, os ollos azuis sonche mentireiros; os traidores son os verdes.

    Bicos con dilatacións

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  5. Y así como empiezan terminan los encantos, un abrazo querida Alis.

    Sara

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  6. Posiblemente sea eso
    pasó, sin haber estado.

    Mil besos

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  7. Dos años sin fijarse en el color de los ojos es demasiado para dos personas que siente atracción. De todos modos el final pone las cosas en suspense.l

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  8. Felices festas, e dígoo coas pupilas dilatadas!!

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  9. upsss... dos años sin mirarse de frente...



    besos

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  10. Bueeeno, bueeeno, non era para tanto. Igual era dos que pensan que amar non é mirarse aos ollos, senón mirar os dous na mesma dirección...

    Apertas e feliz ano.

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