No hay un hogar esperando. Tampoco uno al que volver.
Así partieron, sin otra opción. Confiaban en tener un futuro, porque el presente era un mero tránsito, una huida del pasado hacia la esperanza de otra vida. De una vida, porque la que habían tenido hasta entonces no merecía ese nombre.
Sin nada que llevarse al alma como cable a tierra, con lo puesto, los recuerdos con el único respaldo de su buena memoria y como pertenencias sólo lo que cabía en sus bolsillos. Así partieron. Sin el consuelo de la añoranza, porque nada dejaban atrás que pudiera extrañarse; sólo dolor, odio y hostigamiento.
Iniciaron un viaje sin destino, sin más fortuna que los suyos, los que sobrevivieron a la barbarie, los que guardaron fuerzas para andar, los que no cayeron abatidos por la adversidad.
No hay un hogar esperando. Tampoco uno al que volver. Sólo el camino.
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El camino es una buena senda por la que vale la pena seguir andando pese a todo.
ResponderEliminarBesos, Alís.
Cando o marchar se convirte en destino, ficar parados soa a derrota.
ResponderEliminarE por moito que o camiño sexa o destino, nihil obstat, lembrar o que deixaron no punto de partida...
Bicos dun fillo de camiñantes.
Que pena tener que dejar una tierra o andar y andar sin nada fijo, pero igual encuentran el lugar idoneo donde anclar y hacer una vida feliz.
ResponderEliminarBesos
¡Que dura debe ser la circunstancia que te haga irte para siempre de tu país porque allí no tienes esperanza y llegar a un sitio totalmente desconocido y hostil! es un drama del que no nos damos cuenta los que vivimos bien...da mucha tristeza, pero ves que la mayoría no pierde la esperanza de encontrar una vida mejor
ResponderEliminarPero van, en plural, parece que de momento se tienen unos a otros.
ResponderEliminarQué duro debe ser tener que partir sin destino y no poder quedar porque te echan.
Entretanto quizá hagan como el poeta "camino al andar" que creo que es algo por lo que comenzar.
Bicos.
Si la vida nos empuja a partir, es por algo. Siempre tiendo a pensar, que de alguna forma todo está entrelazado por curiosas redes, que modifican y alteran el destino para el cumplimiento de un plan mayor.
ResponderEliminarUn beso Alis.
Me has dejado triste con esta entrada,la cruel realidad.
ResponderEliminarMil besos corazón.
Si queda el camino, queda mucho.
ResponderEliminarLa aventura.
El verbo 'seguir', ese verbo.
Lo que duele y no mata.
Lo que mata e inmortaliza.
Pero, claro, es tan personal e intransferible que no seré yo quien lo diseccione.
Te dejo un abrazo sin pinturas
Te parece poca fortuna seguir teniendo a los tuyos...hacer el camino juntos?
ResponderEliminarUn besazo Alís.
Caminante no hay camino, se hace camino al andar...
ResponderEliminar¡Besos sentidos Alís!
todos los problemas quedan reducidos a nada cuando piensas en toda esa gente que no tiene hogar...
ResponderEliminar:)
Caminan acompañados.
ResponderEliminarTremendo, vivir sin hogar. Ser un viajero eterno...
ResponderEliminarBesos de mi maleta
Supongo que desde Marruecos, hoy, a Granada llegó una patera cargada de mujeres. Supongo que buscando esa nueva vida de la que hablas.
ResponderEliminar... "una huida del pasado hacia la esperanza de otra vida"...
Una de esas mujeres dió a luz en la patera, están bien.
¿Será ese recien nacido la esperanza de otra vida?
Besos.
¿Y qué pasa cuando no hay un lugar esperándote ni uno al que volver...y ni siquiera hay odio ni hostigamiento ni nada raro en el camino?
ResponderEliminar...Simplemente no hay nada.
no hay brazos en los que detenerse.
ResponderEliminar.
Tremendo camino, espinoso, pero caminan hacía una vida mejor. Seguro. Así lo creen y seguirán creyendo mientras el cuerpo les aguante.
ResponderEliminarUn beso
:(
ResponderEliminarQue triste...no me gustaría estar en su lugar...el dolor quisá no me dejaría caminar....... mandaría todo a la mierda no más.
Besos para ti.
mar
Por suerte muchos de ellos lograron encontrar una nueva vida y un nuevo hogar al otro lado del mar.
ResponderEliminarUn abrazo.
El camino es la esperanza...
ResponderEliminarBesitos
No sé qué me produce más tristeza: esa realidad o el hecho de que lo único que mueva en occidente sea compasión o tristeza.
ResponderEliminarOtro tema pendiente... No sé si vamos a tener ron suficiente.
Al menos se tienen los unos a los otros, con eso ya e ha asegurado el éxito.
ResponderEliminarUn beso.
Tienen esperanza.
ResponderEliminarpero los caminos siempre llevan a algún lugar.
ResponderEliminarbicos,
Esto vienen siendo una alegoría de la emigración, por lo que veo.
ResponderEliminarLos gallegos, los africanos, todas las razas o clases sociales desheredadas del mundo que se ven obligadas a vagar de un sitio a otro para sobrevivir... una epopeya.
Y la incertidumbre quema por dentro.
ResponderEliminarmuakis
Leo tu entrada y pienso en lo que nos ha pasado en Argentina, recientemente, en Soldati, con inmigrantes que vienen al país en busca de un futuro mejor y son presa de nuestros xenófobos de siempre, de una derecha que quiere las calles limpias, sin pobres que lesionen la imagen de la bella Buenos Aires.
ResponderEliminarY sí les queda el camino, hay que seguir caminando, por un mundo que nos incluya a todos, sin discriminación.
Beso grande
Alis me dejaste con la boca abierta y sin palabras, más veo un texto cargado de emociones en las entrelineas...
ResponderEliminarAbrazos
Hola Alis, soy un seguidor muy reciente tuyo, y te quería decir que me encanta como escribes, me ayuda a ser mejor cada día.
ResponderEliminarun saludo desde mi contenedor de ideas.
Triste muy triste, y una gran realidad.
ResponderEliminarsiempre nos dejas escritos que nos hacen temblar.
Besos y susurros muy dulces
Sin embargo, siempre se puede volver a empezar, sin más equipaje que la esperanza. Besitos querida Alís.
ResponderEliminarUna vida dura. Tal vez el camino les dé alguna alegría. La vida nos sorprende cuando menos lo esperamos.
ResponderEliminarBesos
"El pasado es un prólogo" Shakespeare
ResponderEliminarEl camino es muy duro cuando no hay otra cosa. O debe de serlo, porque yo, por suerte, nunca he tenido la necesidad ineludible de mudarme y echar a andar sabe Dios adónde
ResponderEliminarPartieron con la esperanza en los ojos... la meta, en el horizonte.... algunos, sólo algunos, la alcanzarán.
ResponderEliminarbesos
cada dia un camino distinto..
ResponderEliminarTodo lo que venga
ResponderEliminardespués de dejar
el infierno, a la
fuerza tiene que
ser mejor o eso
se espera.
Moitos biquiños.
Mentres haxa un camiño tamén haberá a esperanza dun futuro mellor.
ResponderEliminarBicos.
El camino y nada más, que diría el genial poeta. Qué dolor todos los que se fueron de algún lugar así...
ResponderEliminarEs muy triste tener que dejar tu tierra, tu casa y partir. Valientes ellos, la vida es dura, pero de este modo, buscando y haciendose camino al andar, juntos, quizás haya esperanza.
ResponderEliminarMuchas gracias y un saludo
Dejar atrás nuestro paisaje, nuestra familia, nuestra casa debe ser como morirse un poco.
ResponderEliminarY es que vamos por el camino, algunos dejandolo todo solo con la esperanza, de que este camino nos lleve "a algo mejor"..solo asi, uno es capaz de dejarlo todo.
ResponderEliminarPor mejoria, mi casa dejaria..
Caminar te hace crecer... el problema es caminar sin destino....Es la ausencia de destino lo que nos hace sufrir...
ResponderEliminarmi beso
el magnetista
Y se hace camino al andar, como dijo el poeta.
ResponderEliminarMuy humano. Me gustó.
Besoss
Cruel realidad… muy bueno ¡!!!
ResponderEliminarBesos.
Debe ser durísimo, no lo conozco personalmente. Pero todas la personas que se vieron obligados a emigrar (entre ellos mis padres), mantenían una pequeña esperanza e ilusión en que sus vidas (ya con nombre propio) cambiaran a mejor. Aunque todos los exiliados por la guerra civil y los años siguientes de extrema pobreza, no perdieron el deseo de volver alguna vez a la tierra que los vió nacer, para estar con las personas que constituían su familia, a pesar de que el tiempo te hace ver que eres de donde vives.
ResponderEliminarUn saludo.
Al escribir el texto, pensaba más en los refugiados que en los emigrantes, aunque también éstos sufren el desarraigo. En todo caso, tanto unos como otros son prueba de que la vida sigue por más difícil que se pueda poner, que hay que seguir en el camino, porque la vida quita, pero también da.
ResponderEliminarMe gusta responderos uno a uno, pero además de que diciembre es un mes malo anímicamente, también está lleno de actividades y deberes que me roban el tiempo. No consigo ponerme al día con vuestros blogs ni responder con tiempo vuestros comentarios. Espero que enero venga mejor.
Gracias a todos por seguir pasándoos por aquí incluso en estas semanas que os tengo abandonados, y bienvenidos Diego Lago y .A
Besos para todos