lunes, 30 de septiembre de 2019

Por tu culpa


Fotografía: Raymond Prunin

- Tenemos que juntarnos a las cuatro en punto, en casa de Pierre. Marie y sus amigas se reúnen en el parque a las cuatro y media y tenemos que estar allí cuando lleguen. Que no vayan a creer que las seguimos. Llegando antes también podemos elegir un lugar estratégico para ver de frente cómo se columpian. Sus faldas se levantan…

- Tenemos que irnos. Tengo que llevarle la baguette a mamá.
- Espera un momento, Thomas. Déjame escuchar. Esto está interesante.
- Me va a volver a reñir… por tu culpa.

sábado, 28 de septiembre de 2019

Desazón




Se instala en el pecho
y en la boca del estómago.
No es violenta,
no es gigante,
es más bien discreta
y perseverante.
Es una gota china,
el vacío inquietante,
es el aire que me falta,
la presencia distante.
La respuesta esquiva,
la pregunta constante.
La tristeza profunda,
la ternura vacante.
Es la palabra que hiere,
el silencio insultante,
un gesto que demuestra
el olvido lacerante.
Es un sueño que muere,
una renuncia flagrante.
Es la locura obsesiva,
la mirada irritante,
es el sueño que dimite
y el cansancio habitante.
Es la herida sangrante,
el llanto incesante,
el suspiro anhelante,
y es la culpa rumiante.
Es la ilusión litigante,
el empeño jadeante,
un intento hilarante,
la angustia penetrante,
el ahogo aniquilante,
es la muerte gestante.

Es la nota de suicidio 
de un deseo militante.


viernes, 27 de septiembre de 2019

Invierno




Fue en aquel invierno tan duro. ¿Lo recuerdas?
Yo tenía frío y a ti te sobraba fuego.


Llegó luego la primavera,
cubrió de jazmín la huella de la memoria.


miércoles, 25 de septiembre de 2019

Amiga


Imagen: Cueca brava, de Juan Carlos Plaza

La mira. Podría estar horas así. Le gusta observarla. Cuando baila, cuando camina, cuando sonríe y sobre todo cuando habla. Siempre disfrutó todas y cada una de las largas conversaciones que han tenido. Incluso aquélla en que rechazó el beso con el que confesaba que la amaba.

- Prefiero ser tu amiga.
- No tienes por qué dejar de serlo.
- Quiero ser sólo tu amiga. Me siento muy orgullosa de que sea así.
- ¿Por qué?
- Porque son menos las que eliges para ser sólo amigas.
- ¿Ah, sí? ¿Y por qué crees que sería?
- Porque te cuesta menos entregar tu cuerpo que entregar tu alma.

lunes, 23 de septiembre de 2019

Si llorase, ¿qué lloraría?


Imagen: Deviantart

Hay un llanto asomando que no sabe presentarse. Es un llanto amnésico, no recuerda de dónde viene ni a dónde va, desconoce su nombre y su causa, su razón de ser. Pero se sabe vivo.

Es un llanto hambriento, que se llena con mis vacíos, se alimenta de mi fragilidad y se sacia con mi deriva caótica e imprevisible. Pero no desaparece.

Es un llanto desordenado, que se hace fuerte con mis miedos. Es la avalancha atenta al menor ruido para salir disparada. Pero decide esperar.

Y yo ando con ganas de gritar…

sábado, 21 de septiembre de 2019

Un año de amor



No fue al azar aunque sí inesperado. Fue el resultado del crecimiento, de estar mejor parada, sosteniéndome como raíz, tallo y ramas, transitando ya el otoño y sorprendiéndome con todo lo que nace en esta estación de la vida aparentemente de muerte. Hasta en invierno florece… el camelio.

No fue al azar, era el momento. Kairós mágico y poderoso. La necesidad y la determinación de sentirme viva, de hacer aquello con lo que me siento viva aunque suponga mirar de frente todo lo que me mata. Descubrir que el mundo existe. Que yo existo. Y desear gritarlo al viento.

Pasó un año ya, un año de amor… en palabras, consumado en versos, nutrido con diálogos, padecido y vomitado a veces, gozado… sobre todo gozado. Un año que ha despertado fantasmas, renovado ilusiones, descubierto el asombro de los encuentros… sintiendo de nuevo la sangre bullir en mis venas.

¿Recuerdas? Pasó un año ya de aquel resucítame y aquí sigo…

…latiendo.

jueves, 19 de septiembre de 2019

Bendita locura





¡Ya no tenemos edad para estas cosas!

(Y menos para perder el tiempo)



martes, 17 de septiembre de 2019

Buen provecho


Fotografía: Nu femení, de Josep María Cañellas

- ¿Qué hay para comer?
- ¿Para comer ahora?
- Sí, tengo hambre.
- ¡Pero si vienes de cenar!
- No comí nada guasapeando contigo. Cuando fui a probar bocado estaba helado.
- Menos mal que aquí está caliente.

Laura se pone de puntillas para besar a Fernando. Le fascina hacerlo siempre que llega. El aparece y parece que se abre el cielo. Su mano reposa en ese cuello que siempre la llama... tierna, sensual… 

Al estirarse para besarlo se le cae la toalla. Y le sonríe.

- Buen provecho.

domingo, 15 de septiembre de 2019

Recordándote




Risa,
cosquillas, 
caricias…

Sentirte a la vez
la liviana brisa
y el océano profundo.

Y amarte.

viernes, 13 de septiembre de 2019

Dulce condena (encadenada)




Querría empezar por el color de tus pupilas
pero me borro cuando me asomo a tus ojos
y al vértigo que siento si desvías la mirada.
Me aferro, me sumerjo, me pierdo en ella
y a través de ella, me encuentro de nuevo.

Querría empezar por el tacto de tu caricia
y de como inconscientes tus dedos erizan mi piel 
El repiqueteo de tus yemas tocando mis notas
deslizándose, afinando y tocándome siempre bien.
Eres luthier de mi cuerpo templando mis cuerdas,
y la repentización del pentagrama vacío de nuestra existencia...

Querría empezar por donde sea (que sea) tuyo
que delimite en tiempo y espacio lo que (sea que) quieras darme
que me condene a encadenarme de manera perpetua
a esta (tuya) dulce condena.

                                Alís y Laura

miércoles, 11 de septiembre de 2019

Mi mano


Fotografía: Pinterest

Estoy segura de que notaste mi respingo. El roce distraído de tu mano en la mía me tomó desprevenida, con la guardia baja. Me asaltaron repentinos los recuerdos de tantos roces anteriores… las caricias, los pulsos y alguna herida.

Recordé la humedad de tus lágrimas más amargas, que con esta mano enjugué. La suavidad de la piel de tu mejilla penetrando y modificando mis huellas dactilares. El cálido tacto (a ratos fuego) de tu cuerpo en mi palma, piel a manos llenas e igualmente ávidas. La firmeza de tus ganas concentradas y acumuladas, agradecidas de mi memoria y mis olvidos. La fría dureza de tu espalda cuando era la del rechazo. Y la gélida amnesia de la distancia sostenida en el tiempo.

Todo eso, de golpe, por sorpresa. Fueron, en uno, todos los roces anteriores. 

¡Tanta vida en un roce distraído!

Estoy segura de que notaste mi respingo…

¿Cómo habrás sentido tú el roce de la mía?

lunes, 9 de septiembre de 2019

No me mires


Fotografía: Levitation- Natsumi Hayashi

No me mires. Cierra los ojos antes de que el pudor me amordace. Sales ganando. Confórmate con mirar con la piel, o podría(s) perderme entera. Ya sabes, peor es nada. Y yo, al contrario de los bebés cuando juegan, cuando no veo sí estoy. Ciega de presencia.

No me mires. Cierra esos ojos antes de que me queme con ellos. O no… No te conformes con nada. Desea(me) siempre más. Desafíame. Acompáñame a dar un paso más, cada vez. Invítame a bailar todas las músicas que nos suenen, que nos hablen. En volandas de ti.

No me mires. Cierra los ojos… 

O no.


Epílogo:


Mira, sí. Mira
la locura que desatas.
El rubor de mi atreverme.
El cansancio de lograrlo.

Este brillo suicida de mis ojos
deseando naufragar en los tuyos.

sábado, 7 de septiembre de 2019

Otoño gris


Fotografía: Juncal Cacho

Todo me lleva a ti
en este otoño 
que se ha vuelto gris
a fuerza de silencios
invernales, gélidos,
letalmente afilados.
Inclemente frialdad
que desdibuja el camino
sin salida, sin opciones, 
que me lleva a ti
en este otoño
que se ha vuelto gris
a fuerza de silencios.

jueves, 5 de septiembre de 2019

Hazme una foto


Fotografía: unacitazionealgiorno.com 

- Te gustaba hacerme fotos todo el tiempo.

- ¿Cómo evitarlo? A ti te gustaba andar desnuda.

- …

- …

- ¿Trajiste la cámara?

martes, 3 de septiembre de 2019

S.O.S.


Fotografía: Alís Gómez

El viento sacude las hojas del canelo, que a su merced reaccionan jugando con la luz del Sol, emitiendo destellos que más que hablar, gritan. Tres puntos, tres rayas, tres puntos… Y no tengo claro si interpreto su mensaje o si estoy lanzando el mío.

Tanta deriva me nubla la mirada, apenas ya con fuerza para agarrarme a cualquier resto de naufragio que encuentro, sin darme cuenta de que el mar maneja a su antojo cualquier despojo de un pasado, glorioso sí, pero roto y hundido. Y a mí con ellos.

Tanto desierto me resecó, hasta el tuétano, y tan seca el alma que apenas si puedo reptar por los tiempos que me tocan; alucinada me aferro a cada trampa que dibuja la ilusión sin percatarme de cómo me entierro en esta arena movediza. Y muero, deshidratada.

El viento sacude las hojas del canelo. Y envidio esa fragilidad que danza con la adversidad y logra sobrevivir a los embates de la vida, llamada viento, mar o desierto. 

Mientras, transito este desaSOSiego.

domingo, 1 de septiembre de 2019

Soñar


Imagen: "The blue room", de Suzanne Valadon

Aún no he soñado contigo,
pero no debe de faltar mucho.
;)

Sueño el vértigo, el mareo de habitar la vorágine de este ciclón en que se convirtió esto a lo que tanto cuesta ponerle nombre. Y sin gobierno, apenas la estela de una ilusión de control. 

Sueño la ola, la humedad de saberme sumergida en esta tibia marea que fluctúa indecisa del refugio al deseo, y viceversa. Descansar en la armonía de fluir, aún sabiendo que las olas siempre rompen.

Sueño posible lo imposible, la confianza en lo que nace a corazón abierto, el milagro de sentirme cuidada y cuidando, la certeza de que todo el futuro está por delante por más largo o corto que sea. 

Nada es imposible en el futuro.

Ni soñar.