Fotografía: Juncal Cacho
Desperté y vi tu fotografía. Deduje inmediatamente qué significaba. Aún sabiendo que sucedería, me impacta tu partida. Y me siento triste.
Tienes mucho que ver con este blog. Has estado presente prácticamente desde el inicio y tus comentarios me acompañaron a lo largo de estos años. Inteligentes, divertidos y con una intuición que nunca dejó de sorprenderme. Sentía que me conocías aunque nunca logramos vernos en persona. Siempre fue una promesa pendiente de cumplir.
Detectabas en mis textos las profundidades de mi alma y sutilmente lo expresabas, sin exponerme, sin descuidarme y también sin dejar pasar eso que presentías. Me hacía bien saberme escuchada, comprendida, incluso descubierta. Me acompañaste en los momentos escritos más dolorosos, te reíste y trajiste tu sentido del humor en los más livianos. Y entrabas al juego cuando mis textos sólo pretendían provocar reflexiones. Fuiste cómplice.
Como también fuiste cómplice cuando te pedí que hicieras una fotografía para la cabecera de mi blog. ¡Me encantan tus fotografías! No tuve apenas que darte indicaciones. Y tampoco quería, porque lo que me ilusionaba era tener tu arte acompañándome. Cuando me enviaste las fotos que habías hecho eran exactamente lo que yo deseaba. Los colores que yo deseaba. Y nos reímos porque incluso los objetos que elegiste reflejaban mucho de mí. Siempre me intuiste.
Tu intuición, tu sensibilidad, tu honestidad y tu sentido estético estaba presente en cada uno de tus comentarios, como lo está en tus fotografías, que generosamente siempre me permitiste usar. Con ellas quiero recordarte hoy. Con algunas de las que me cediste para acompañar mis textos y que en los últimos años me permitieron estar en contacto contigo, a través de una pasión con la que además de reflejar la belleza con la que te ibas encontrando en tus paseos también refleja tu belleza interior.
Te he admirado siempre, Juncal. Lo sigo haciendo. Te considero una mujer fuerte, valiente, sensible, intuitiva. Sé que esos valores, allá donde sea que estés viajando, te acompañarán. Te imagino mirando con ojos de asombro ese nuevo lugar y haciendo fotografías de todos esos detalles que hacen bello el espacio por el que te mueves. Tu mirada lo hace bello.
Y te deseo un buen viaje, tranquilo y en paz.
Me he quedado sin entender muy bien esta partida de Juncal, al final mi intuición ha seguido el camino y se ha encontrado con la esquela.
ResponderEliminarLe deseo ese buen viaje, tranquilo y en paz.
Gracias por informar con este hermoso texto que le has dedicado a esta buena compañera y amiga. Descanse en paz. Un abrazo fuerte Alis.
Hola, Carmen.
EliminarTal vez recurrí mucho al eufemismo, como si me resistiera a decirlo. Juncal falleció ayer, demasiado pronto creo yo.
Gracias por tus palabras y tu presencia
Un abrazo
Que en su reposo tenga la mirada atenta para captarlo todo.
ResponderEliminarUn abrazo.
Un abrazo, siento su partida, es precioso todo lo que habeis compartido y así queda ese recuerdo que abraza, está presente.
ResponderEliminarBesitos Alis
Demasiado pronto, siempre es demasiado pronto.
ResponderEliminarSalud
Está claro lo que expresan tus palabras.
ResponderEliminarY hay quienes hacen la diferencia con sus actos, su presencia, sus palabras. Que hacen que se los extrañe cuando parten.
Emotivo.
Besos.
Buen camino para Juncal.
ResponderEliminarLo siento, Alís. Te acompaño en tu sentimiento.
Un abrazo muy fuerte.
Qué bonito homenaje, Alís. Seguro que, allá donde esté, le habrás despertado una sonrisa. Siento no haberla conocido. Mi abrazo para quienes habéis tenido la fortuna de hacerlo.
ResponderEliminarQué difícil es siempre despedirse, qué pena llevan los que marchan sabiendo que nos dejan entristecidos e incompletos. Un fuerte abrazo.
ResponderEliminarLamento mucho tu pérdida. Todo tu cariño le llegará, lo sé.
ResponderEliminarMil besitos y mi abrazo de ánimo 🤗✨
Es esperanzador volver a leerte aunque sea para algo tan triste.
ResponderEliminarLo que has escrito es muy hermoso Alís, seguro que Juncal desde donde esté se alegrará.
ResponderEliminarUn abrazo.
Lo siento Alís. Has escrito algo muy bonito de ella y de ella contigo. Un abrazo fuerte
ResponderEliminarque bonito que escribes
ResponderEliminarsaludos
Descanse en paz.
ResponderEliminarSalu2, Alis.