Deja de mirarme así. ¿Quién te ha dado el derecho a juzgarme? Y encima me condenas. Tú, precisamente tú, que deberías comprenderme y apoyarme mejor que nadie.
Deja de mirarme así o romperé todos los espejos de la casa.
WOKE CELESTE
Hace 57 segundos
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querida Alis, gracias por la correción, ya lo arreglé.
ResponderEliminar(supongo que este tu primer terremoto)
está muy bueno este poema!
un abrazo!
Jajaja, ¡somos tan duras con nosotras mismas!
ResponderEliminarEs lo malo de los espejos, que hay días que hasta parece que hablen.
ResponderEliminarLa bruja de Blancanieves ya ves lo que hizo con él;)
Besos, Alís y gracias a ti.
Muy bien dicho.
ResponderEliminarQue se ha pensado esa impostora.
Que te deje en paz.
Besos.
Cuantas veces me sucede a mi lo mismo
ResponderEliminarMe ha encantado
Bicos meigos
Pero aún y eliminando el reflejo, la mirada permanecerá...
ResponderEliminarDicen los gitanos que romper un cristal, trae cién años de mal augurio. Yo no soy supersticiosa, más bién práctica por eso no rompo ninguno, aunque no me guste lo que veo en él.
ResponderEliminar¡Artista! que eres una artista, ¡leñe!
pd: He borrao el anterior, era igual a este pero sin erres.
Mejor tratarse y quererse a uno mismo...al final seremos nuestro mejor aliado...además, quién dice que te miras en el espejo perfecto?
ResponderEliminarbesos
Alís, ni se te ocurra XD!, que son 7 años de mala suerte por cada espejo rotooo. ¡Ay! ¡Ay! ¡Ay!
ResponderEliminar¡Muaak!
Cuando ese cabrito me mira de esa manera lo que hago es enviarle un besito y una sonrisa picarona, no veas como cambia su mirada !
ResponderEliminarBesos cielo.
Ah!
ResponderEliminarYo no rompo los espejos, la vida está muyyyyyyyyy cara para andar reponiendolos continuamente jaja
A veces pienso que los espejos tienen dias especiales, como nosotros, hay dias que nos acusan con el dedo y otros sin embargo, parecen querer amigarse con nosotros.
ResponderEliminarBesos descalzos y gracias Alis por pasar por mi lugar.
¡Holaaaa! :-)
ResponderEliminar¡Qué interesante tu relato! Cortito y contundente.
Yo creo que después de esto, ya se ha enterado, ¿eh?
Un abrazo, Alís. Tan cerca como el Océano, me deja.
Con afecto,
Fdo: Sucette D´Ment
Hago un Flash Back hasta el terremoto de 1985 para decirte que en aquella ocasión se nos rompió un gran espejo que estaba colgado el el pasillo del piso segundo de la casa.Tenia mas de dos metros de altura por uno de ancho. El ruido fue como una gran explosión. Las consecuencias, es que no quise guardar ni un pequeño trozo como recuerdo. Si la naturaleza lo rompio, sus razones tendría. Fue con lo único que estuve de acuerdo.
ResponderEliminarUn beso
Guau, qué bueno, Alís!
ResponderEliminarQué bien reflejaste esa batalla interna que mantenemos día a día.
Yo soy de muchos espejos y, claro, ahí ando liado con "la otra parte"...
Un gran beso!!
Yo prefiero no mirarme. Porque a lo mejor me dice cosas que no em gustan....
ResponderEliminarMás ánimos.... Venga!!
Excelente post el que nos acercas en este día.
ResponderEliminarEs un placer siempre acercarse a tu espacio.
Gracias por compartir.
Cálido abrazo.
Opino como Marieta, yo no me miro: salvo que tenga un día radiante.
ResponderEliminarLlevo tres días sin acercarme a él.
Recuerdo haber escrito algo parecido hace un tiempo, my lady. Obviamente me encantó... Y me ha gustado la foto... ¿eres tú? Bueno, no lo desveles...
ResponderEliminarPor cierto, yo también tengo una recomendación de lectura, hazme caso... pincha en la venus de milo de mi blog y léele, merece la pena, en serio. A mí me gusta tanto su poesía como su prosa... cosas de la red!
Un beso, grande.
LADY JONES
PD. Veo que poco a poco, vuelves... Me alegro... mucho, mucho.
Directamente compré pocos espejos, y los que compré los puse de forma que no pudiera mirarme... ¿para qué?
ResponderEliminarSácale la lengua y olvídate de El.Verás que pronto te sonríe.
ResponderEliminarUn millón de besos.
Morgana.
Querida amiga, todos tenemos una dualidad. Nuestro otro yo que es el encargado de amargarnos la existencia. Algunos lo llaman conciencia
ResponderEliminarEs un enfrentamiento entre el Dr. Jekill y Mr. Hyde pero siendo ambos conscientes de a quien tienen enfrente.
No te dejes engatusar. Puede ser tan convincente como desagradable. A veces ocurrren cosas y nadie tiene la culpa de que ocurran.
Un beso Alis
Resulta que somos nuestras más duras Jueces, y no olvidamos nuestros errores... pero pasa sobretodo cuando te quedas demasiado tiempo buscando y excavando las razones para creer que no estabas tan equivocada, me explico? espero que si, esa que te mira en el espejo, debería decirte, ya está... aprende y sigue adelante...
ResponderEliminarNo me he ido, me di un tiempo de inventariar el alma para poner cada cosa en su lugar y he vuelto mi querida amiga, como siempre es un gusto leerte...y saber que estas bien.
Un abrazo,
No permitas que te condene,jamas,nadie tiene derecho a eso...si necesitas ayuda voy y le tiramos las dos de los pelos ;)
ResponderEliminarUn besazo
PD no se te ocurra romper el espejo que en unos días,"esta" estará suave como un guante y te dirá que eres de entre todas la más guapa y radiente ;)
Me gusta, y mucho, la firme y dura debilidad con que le hablas a esa extraña y querida mujer.
ResponderEliminarSi no te molesta me pasearé por aquí con más tiempo.
Un beso.
... A veces pasa, yo también a veces observo a mi peor enemiga, en el espejo.
ResponderEliminarUn abrazo
BB
GENIALIDAD ALIS !!!!!!!!!!!!
ResponderEliminarCUANTAS VECES ME SUCEDE POR DIOS HAS PLASMADO TODO AQUELLO QUE MUCHAS VECES DEBEMOS ATRAVEZAR
ME ENCANTO SOBRE TODO EN ESTE DIA
FELIZ DIA PARA TODAS !!!!!!
SALUDOS
Teoricamente te recomendaria que hablaras con el.
ResponderEliminarPracticamente, en un principio trataria de limpiarlo y si sigue en sus terce y no te hace caso lo romperia en mil pedazos.
Besos.
los espejos noooooooooo!
ResponderEliminar(¿autocrítica, amiga?)
déjame en paz los espejos!!
No. Yo no estoy de acuerdo.
ResponderEliminarCreo que hay que mirarlo a la cara fijamente, no bajar la mirada, retarle con ella. De ese modo, será la imagen la que nos tema.
Luego le daremos brillo de vez en cuando, si se porta bien...
Un beso
Lala
A veces non vemos lo que queremos o no nos reconocemos en nuestros hechos o pensamientos...
ResponderEliminaren esos días mejor no mirarse y recordar quien eres...
besos linda
Es lo malo de mirarse a uno mismo: a veces dan ganas de abofetearse. Está claro, somos nuestro peor enemigo.
ResponderEliminarTe adoro, petarda.
ResponderEliminarEXCELENTE Alís, muy bueno, me encantó. La arrogancia de los espejos a veces da ganas de hacerlos pedazos..
ResponderEliminarCariños!
Mi querida Alis. Como buen hombre cuando leo algo como lo suyo tiendo a ser resolutivo y buscar soluciones del tipo "rompa el espejo", por una vez intentaré ser inteligente y le diré "siga mirando, siga, siga... hasta que desaparezca".
ResponderEliminarUn abrazo y gracias por sus palabras...
Siempre suyo
Un completo gilipollas
Un llamado a aceptarnos tal cual somos........con virtudes y defectos .......pero despiertas a la vida y sus cosas bellas.
ResponderEliminarFELICES 365 DIAS DE LA MUJER.
Besos y abrazos
mar
Deja de mirarme así y muévete alguna vez.
ResponderEliminar¿Que no te he puesto todavía la cena?
Y tú qué. Tan solo por una pequeña diferencia.
Tan pequeña.
Ali's,
ResponderEliminarDejé un beso para ti por hoy, en mi blog.
Mi cariño,
Anderson Fabiano
No habia podido conectarme a estos medios, pero me alegra en el alma saber que estais todos bien.
ResponderEliminarmientras leia esto que escribiste estaba pensando en mi comentario, diria algo como: la respuesta la tiene tu misma.
pero cuando llegue al final, me quede sin palabras, maja mi mas tremenda admiracion.
Nadie tiene derecho
ResponderEliminara juzgarnos y menos
nuestros propios espejos.
Muy bueno Alís.
Besos
Alejandra: gracias a ti. Un abrazo.
ResponderEliminarEspérame en Siberia: sí que lo somos, sí. Beso.
Eva: En reallidad, los espejos sólo reflejan lo que ven. Besitos.
Toro: Sí, es que me estaba tocando las narices ya. Besos.
Meiguiña: Y las que nos quedan… Gracias. Bicos.
Cesc: Claro que permanecerá, pero al menos no la veré… un engañabobos, lo sé. Besos.
Nikté: Lo que me faltaba, tener mala suerte los próximos cien años. Tal vez no me arriesgue, con 50 aún me atrevería, pero… ¡¡100!! Besitos
Alberto: ¿existe el espejo perfecto? ¿cómo sería? Por si acaso, si encuentras uno, por favor mándamelo. Besos.
Carlos Fox: Ay, qué miedo. No gracias, no quiero más mala suerte. Ya va tocando que venga la buena. Beso.
ResponderEliminarCapri: Admito que sonreírme a mí misma me cuesta, sobre todo últimamente. Pero lo intentaré. Tal vez funcione. Besitos.
Descalza: Y qué casualidad, los días especiales de los espejos suelen coincidir con los nuestros… Fue un placer pasar por tu casa. Besitos.
Sucette: Se está enterando, sí. Ya iba siendo hora. Un abrazo fuerte.
Albino: A mí se me rompió una viejita a la que le tenía mucho cariño. No había modo de pegarla. Pero su cabeza se salvó y la guardo. No pude tirarla. Bicos
jose rasero: No creas, que a mí me encantan los espejos. Por eso me pasa lo que me pasa. Pero ellos sólo son los mensajeros… la batalla ya sabes con quién es. Besote.
Marieta: Tienen un fallo los espejos: suelen ser sinceros. Gracias! Besos (espero que te sientas mejor).
Paco Alonso: Gracias a ti, como siempre. Un abrazo.
Titajú: Si espero a tener un día radiante temo que no volveré a mirarme en un espejo, jeje. Pero ánimo, que tú puedes. Beso.
ResponderEliminarLady: No lo desvelo… jajaja. Me gustó tu recomendación. Por allí nos veremos. Y sí, estoy volviendo, paso a paso. Besote.
Camaleona: Los espejos hacia la pared no sirven de mucho… para eso mejor no ponerlos. Pero si es que no sabemos mirarnos. Si lo hiciéramos bien, nos encantaríamos. Besos.
Morgana: Créeme, el espejo no es el que me preocupa. Besotes.
Chinaski: Ultimamente me parece más desagradable que convincente, pero ya le canté las cuarenta a mi Pepito Grillo. A ver si se da por aludido… (Es difícil sacudirse la culpa, sobre todo cuando no se tiene. Por mucho que sacudas, no sale…). Gracias. Un beso.
Sara: Te explicas muy bien y me entendiste a la perfección. Me alegro de verte. Beso grande.
Nela: No sé si me conviene que le tires de los pelos, creo que me dolería… pero tal vez acepte tu ayuda para decirle un par de cosas. Te avisaré. Creo que no romperé nada. Gracias. Besito.
CarloZ: Recién llegas y ya sabes que para mí es extraña y querida esa mujer. Ese ojo que tienes me alegra y me asusta a la vez. Bienvenido, es un gusto verte por aquí. Ponte cómodo. Beso.
BB: Basta ponerse delante del espejo para encontrar a tu peor enemigo. Conozco esa sensación. Un fuerte abrazo.
ResponderEliminarLuluZiña: Me temo que es un mal de muchos… aunque no me consuela. Gracias. Besitos.
Nacho: Espero que funcione la primera parte de tu consejo. A fin de cuentas, romperlo sería sólo matar al mensajero. Besos.
transitorio: tranquilo, me gustan así que no los romperé. Estaba coaccionando para que me dejara en paz. (autocrítica, sí, amigo). biquiños (los olvidaste, por cierto, así que ya conozco tu punto débil: ¡¡los espejos!!).
Lala: Te haré caso. Y ya te contaré si resulta… Besote.
Suso: Sí, hay días que es mejor ni dirigirse la palabra. Ya vendrán otros mejores ¿no? Besos.
Paseante: totalmente de acuerdo contigo. Besos.
Nikté: imagina que soy un espejo. Beso.
Sol – Imaginario Desesperación: Me preocupa más la dureza y el juicio de quien se refleja cuando nos miramos en ellos. Gracias. Un fuerte abrazo.
ResponderEliminarSr. CG: Si desaparece el reflejo ¿desaparezco yo también? Y ya ve usted que si lo intenta, puede hilar un pensamiento inteligente (o parecido)… claro que si persiste, perderá su esencia. Usted verá lo que hace. Gracias a usted. Beso.
Mar: Magnífico consejo que intuyo que sabes cómo se aplica. Yo estoy intentando aprender. Veremos si lo logro. Gracias. Besos.
tecla: hemos coincidido con los espejos… por algo será. Beso.
Anderson Fabiano: Lo he visto y me gustó mucho. Gracias por pensar en nosotras como lo haces. Un abrazo.
Asturiela: Sí, estamos bien. Reponiéndonos. Jajaja, creías que hablaba con un oponente más fácil ¿verdad? Besitos.
Marisa: Y aún así nuestro reflejo insiste en hacerlo, con total desvergüenza. Gracias. Bicos.
Es muy jodido descubrirse y muy valiente reconocerse.
ResponderEliminares un ejercicio interesante el del espejo.
besitos
Ayer olvide dejarte mis saludos del Dia Internacional de la Mujer, pero fue curioso, este año sentí que no se habló demasiado del tema, que nos olvidamos de la historia de algunas mujeres con facilidad o quizas estemos pasando todos por un momento de hipnosis general.
ResponderEliminarBesos atrasados entonces y feliz dia MUJER!
Alis,¡tira ese espejo! Yo no lo hibiera descrito mejor, no hace falta que sea un espejo... ¡es un maldito espejo que te consume!
ResponderEliminarBesitos, gracias por permtir que pase a verte.
Pidale a CAT'S que le haga hacer un ejercicio con el espejo ;)
ResponderEliminarLast sunday llevamos acabo el experimento.
Le cuento que de uno de mis talleres literarios me llegó este poema.
Mire como Silvia Plath le puso alma al espejo.
EL ESPEJO
Soy de plata y exacto. No tengo prejuicios.
Todo lo que veo lo trago de inmediato
tal y como es, sin la turbiedad del amor o de la antipatía.
No soy cruel, sólo veraz.
El ojo de un diosecillo, con cuatro esquinas.
La mayor parte del tiempo medito sobre la pared de enfrente.
Es rosada, con manchas. La he mirado tanto
que creo que forma parte de mi corazón. Pero se mueve.
Caras y oscuridad nos separan una y otra vez.
Ahora soy un lago. Una mujer se asoma sobre mí,
buscando en mi extensión lo que ella es en realidad.
Luego se vuelve hacia esas embusteras, las velas o la luna.
Veo su espalda y la reflejo con fidelidad.
Me recompensa con lágrimas y gesticula con las manos.
Soy importante para ella. Viene y va.
Cada mañana es su cara lo que sucede a la oscuridad.
En mí ha ahogado a una muchacha, y desde mi una mujer mayor
se eleva hacia ella día tras día, como un pez terrible.
Cat´s: Jodido, sí. Y la valentía no suele ser fácil. Me dice Rochitas que te pida que me sugieras un ejercicio para hacer con el espejo ¿cuál sería? Besitos.
ResponderEliminarDescalza: Saludos también para ti en el Día de la Mujer. Aunque para mí es un día triste, en el sentido de que me recuerda que todavía es necesario dedicar especial atención a las mujeres y defenderlas. Me hace perder un poco de esperanza en el ser humano. Gracias. Un besote.
Mona lisa: En serio, no es el espejo. Él sólo me muestra mi propia autocrítica. Y no seas boba, no sólo no tengo que permitirte nada, sino que me honra que sigas viniendo. Estás en tu casa. Besitos.
Rochitas: Muy bueno el poema de Silvia. Y es que, insisto, el espejo es sólo el mensajero. Un abrazo.
No hay peor crítico que nosotros mismos.
ResponderEliminarUn besito y un susurro muy tierno
Yemayá: Así es. Somos muy duros con nosotros mismos. Besitos
ResponderEliminarY los pobres espejos de la casa que culpa tienen, mas es mejor la indiferencia o ¿no?. Un abrazo.
ResponderEliminarSalud-os desde mi casa sin espejos.
Por cierto, Guapa, ¿de dónde has sacado la foto? Como las sueles firmar ;)¿No serás tú, no?? Porque si eres tú, el reflejo de ese espejo es requeteeqivocado ¿existe esta palabra? JAAA,JAAJAJ, Venga mucho ánimo y a darle abrazitos a tu hija.
ResponderEliminarNo hay peor juez que uno mismo....
ResponderEliminaryo a veces soy demasiado fuerte conmigo misma, pero eso me ha ayudado muchas veces.
Un beso...
Que rabia de todo lo que me he perdido!!!
Huayat: Tienes razón. Los espejos no tienen culpa, salvo porque me muestran los ojos con que me miro... Un fuerte abrazo.
ResponderEliminarMona lisa: No he firmado la foto por decisión propia y de su autor, al que conozco muy bien. Y hasta aquí puedo leer, jajaja. Besitos.
zayi: tranquila, no le eches la culpa a tu blog. Es que tú siempre entrabas en Partitura, mi otro blog, que cerré porque parece que estaba infectado y daba problemas para verlo, supongo que por los vídeos. Bienvenida a esta casa. Me alegro de que hayas llegado a esta casa, porque me gustan tus comentarios. Un besote
No creo que sea tan feo lo que ves... Lindo blog! Un beso
ResponderEliminarMartín: Si tus comentarios son siempre así, te pediré que vengas a diario. :) En serio, muchas gracias. Bienvenido y ven cuando quieras. Será un placer. Un beso.
ResponderEliminarAAAAhhhh! ¡Qué pilla! OK OK!!!
ResponderEliminarBesos
¿Por qué no los miras de otra manera? Intentalo, ya verás como ellos también cambian su mirada.
ResponderEliminarUn beso.
John W.
Mona lisa: :-)
ResponderEliminarJohn W.: La sonrisa dirigida a uno mismo suele resultar la más difícil, pero intentaré lo que dices. Gracias. Un beso.
¡Uy! Perdón, yo venía buscando a la señorita Alís. Pero ya veo que me he equivocado, nada, ya me marcho, ehh. No, no hace falta que me intimide hasta la puerta.
ResponderEliminarBolki: Nunca me tengas miedo. Ni cuando ladro... porque nunca muerdo.
ResponderEliminarBesos
Reflejos de una misma, yo también me hablo.
ResponderEliminarMe comprendo bien 😉 besos
Laura, qué suerte que te comprendes bien. Yo tengo mis días, jajajaja
EliminarBesos!!
A veces, somos nuestro más ferviente enemigo y no nos dejamos pasar ni una... quizás porque nos conocemos o quizás porque nos exigimos demasiado. pero es bueno mirarnos y hablarnos.
ResponderEliminarUn beso
Carmela, yo apostaría a que siempre somos nuestro peor enemigo, porque cuando no lo somos, ningún otro puede con nosotros. Los enemigos externos sólo nos afectan cuando no confiamos en nosotros mismos
EliminarBeso
Julio David, qué sorpresa y alegría verte buceando por el pasado de mi cajón desastre.
ResponderEliminarDebo confesar, en secreto, que soy más crítica conmigo que los demás, especialmente quienes me quieren. Pero estoy aprendiendo a mirarme más en otros ojos que en los espejos.
Un abrazo