Fotografía: Vlad Artazov
Envidio el mar en el que te sumerges y sostiene tu cuerpo.
Envidio la ola que te revuelca y te hace perder el control.
Envidio el horizonte que atrae y cautiva tu mirada.
Envidio el viento que acaricia tu rostro y despeina tus ideas.
Envidio la lluvia que humedece tu piel y te cala hasta los huesos.
Envidio las calles que conocen tus pasos y conforman tu camino.
Envidio a la Luna, que vemos al tiempo y te devuelve la mirada.
Envidio al Sol, cuyos rayos te acarician y te entibian cada día.
Envidio tu almohada que sostiene tu cabeza y conoce tus desvelos.
Envidio tus sábanas que abrazan tu cuerpo y arropan tu sopor.
Envidio tus palabras que conocen el sabor de tu boca enamorada.
Envidio también el aire que exhalas en tus tímidos suspiros.
Envidio hasta mis sueños porque están llenos de ti.
Qué envidia más enamorada, amiga. Envidiar el aire que respira el otro, lo que el otro escucha... Quién fuera un muñequito que cupiese en su bolsillo a veces, ¿verdad?. :-)
ResponderEliminarUn abrazo y feliz día.
Quién fuera cualquier cosa que permita estar cerca...
EliminarUn abrazo grande, Albada Dos
Halaaaaaaaaaaaaa!!!!!!!!
ResponderEliminarMenudo poemazo!!!
Estos poemas sólo puede escribirlos el corazón.
Mi aplauso.
Y un besazo.
Muuuuchas gracias!!! Sólo hay que tener la mejor inspiración y permitirse sentir.
EliminarUn beso, Toro Salvaje
Esa envexa cura a alma.
ResponderEliminarEste poema é un abraio de amor que vibra en cada un dos elementos que conforman o outro.
Precioso.
Un bico.
Xa é fermoso o que dis, e ademáis dilo en galego. ¿Qué máis podo pedir? Nada, só decirche grazas, de corazón.
EliminarBicazo
Conociéndote se sabe que tu "envidia" es sana...
ResponderEliminarY tu poesía delicada...
Abrazos amiga.
¿Existe la envidia sana, Ernesto? si te refieres a que no le deseo mal a nadie, estás en lo cierto
EliminarMuchas gracias
Un abrazo gigante
Envidio esa envidia que se instala en virtud del amor...
ResponderEliminarTanto que parece menos envidia, Juncal
EliminarBesos
Mala cosa la envidia pero buena inspiración.
ResponderEliminarBesos.
Mucho más humana de lo que nos gusta admitir, Alfred
EliminarMuchas gracias
Besos
Tierno y delicado poema.
ResponderEliminarEnhorabuena.
Besos.
Muchas gracias, Amapola Azzul
EliminarBesos
Esa es envidia es tan sana,
ResponderEliminarcomo la caricia que llega con cada versos de tus bellos sentimientos Alis
Muchos besos
.
Qué bonito lo que me dices, Precious. Muchas gracias
EliminarBesos
Una envidia quees prueva de amor...
ResponderEliminarVale!!!!
Del amor nace, Pequenos Delitos...
EliminarBeijo
"Envidio hasta mis sueños porque están llenos de ti..." entre otros envidiables versos.
ResponderEliminarAbrazo de esos envidiables que suelen darse.
Ése es quizás el verso que más me gusta. Me agrada que lo hayas traído...
EliminarAbrazo, que no tiene nada que envidiar a ningún otro
Me gustan las personas que envidian lo bueno, lo que no se compra.
ResponderEliminarEscucha "Envy the wind" de Lucinda Williams, dice cosas parecidas a lo que tu tan hermosamente has escrito.
Acabo de escucharla ahora mismo, guille. Sólo pensar que te hice recordar esa canción ya me parece un tremendo halago. Gracias
EliminarUn abrazo
Preciosas letras nacen de la envidia.
ResponderEliminarSaludos.
Más que de la envidia, Yashira, nacen del sentimiento que la provoca
EliminarMuchas gracias
Un abrazo
Envidio a los que te rodean. Pero me conformo con la palabra amiga desde la distancia.
ResponderEliminarGracias por ello.
Guillermo
La palabra amiga/o es grande. No tiene nada que envidiar al mayor de los amores. Será que tengo suerte con mis amig@s
EliminarUn abrazo enorme
Maravillosa envidia amiga, envidia enamorada....Saludos y abrazo Alis.
ResponderEliminarMuchísimas gracias, querida Sandra
EliminarUn abrazo grande
Qué envidia más dulce e inspiradora.
ResponderEliminarSaludos
Muchas gracias, alasdemariposa
EliminarUn abrazo
Has descrito perfectamente lo que siento por Donal Trump😎. Describes sentimientos desde todos los ángulos posibles, algún día me tienes que decir como lo haces.
ResponderEliminarUn beso
Hazte ver eso, Steppenwolf.
EliminarNo hay trucos, ni fórmulas. O al menos yo no los tengo. Sólo sentir y ponerle palabras.
Un beso
Qué poema tan bonito, Alís, qué bello debe ser estar enamorado...
ResponderEliminarMuchas gracias, Republicano... Por lo que leí, estás listo para sentir algo así. Suerte con ello. Que lo puedas disfrutar pronto
EliminarBicos
Wow! yo que no soy envidiosa...acabo de envidiarlo todo... (pero todo todo) y que sensación tan extraña esta, no sé que hacer.
ResponderEliminarAun así, te mando un beso (que lo espero de vuelta) si no me enfado y te envidio de nuevo.
Una cosa más... me ha encantado esta entrada.
Gracias por tanta dulzura escrita. <3
No me das besos, Laura, ¡¡¡me los prestas!!! Pues no pienso devolvértelo. Eso sí, te mando otro, bien grande
EliminarMuchas gracias a ti, por todo
Envidia, tengo envidia de los valles, de los montes y los ríos, de los pueblos y las calles, que has cruzado tú sin mi...
ResponderEliminarBesos.
Qué bonito, Pitt Tristán. Podría añadirlo al poema, sin dudarlo
EliminarBesos
Hay envidias que son adorables, o no?
ResponderEliminardejas en tu poema un ritmo que me deja sabor a bolero
biquiños con son de ar e mar
Me hace sentido ese sabor a bolero. Me veo en él, incluso bailándolo
EliminarBicos, moitos
Bonita envida llena de amor. Beso
ResponderEliminarMuchas gracias, Hanna
EliminarBienvenida
Beso
Esta envidia es de las buenas, de la sana...
ResponderEliminarDa envidia envidiar así.
Besos, Alís.
De las sanas si es que existen...
ResponderEliminarBesos, Eva