Fotografía: Loreto López Baltar
En los primeros días de su estancia en su tierra, de la que llevaba mucho tiempo alejada, acudía siempre al mismo local a comer una o dos raciones de pulpo "á feira". Allí la conocían, a pesar de que sólo iba una o dos veces al año y de que tenían mucha clientela. Demasiada, pensaba cada vez que tenía que llamar con varios días de antelación para hacer una reserva. Llegar sin avisar era absurdo, porque siempre estaban todas las mesas ocupadas y la barra llena de comensales esperando su turno.
Este año se sorprendió cuando al llamar a su "pulpeira" favorita le dijeron que podía ir ese mismo día si lo deseaba. Pensó que no era buena señal, que quizá habían cambiado de dueño y había bajado la calidad del producto, pero era tanto su deseo de degustar su plato favorito que por supuesto aceptó y prefirió pensar que quizá alguien había anulado su reserva y ella había tenido la suerte de telefonear justo después.
Por la noche, después de reunirse con los dos amigos que participaban con ella de ese rito, llegó al establecimiento y no pudo dar crédito a lo que vio. La recibieron las mismas personas de siempre, lo que la alivió, pues se sabía en buenas manos, aunque tenían el rostro afligido, de preocupación. El restaurante estaba totalmente vacío (por primera vez en su vida podían elegir la mesa que quisieran).
Si la atención siempre había sido buena, en esta ocasión fue de lujo. Tanto las dos raciones que pidieron como la tercera extra que les llevaron como obsequio de la casa estuvieron más exquisitas que nunca. Con el café también les invitaron a unas copas. No comprendía qué ocurría, por qué tan vacío el local, pero estaba disfrutando tanto que no quiso romper la magia del momento. Sólo pensó que quizá la crisis económica era más grave de lo que ella imaginaba.
El camarero estuvo encantador y absolutamente pendiente de ellos; sólo se distraía para dar los últimos retoques a un cartel que estaba pegando en la puerta cuando ellos salieron. Al sentirse observado, les comentó: "Según fue avanzando el Mundial, el número de clientes fue bajando de forma considerable. Pero desde que el domingo España ganó, las únicas llamadas que recibimos fueron para anular las reservas hechas con anterioridad". Los tres miraron la cartulina y pudieron leer:
"Ninguno de los pulpos que cocinamos en este local tiene parentesco o relación alguna con el pulpo Paul".
ja ja... Lástima que éste molusco cefalópodo no nos podrá ayudar a predecir el próximo mundial de fútbol, ya que el promedio de vida no supera los dos años. Esperemos que Paul tenga descendencia, y nos deje familiares tan intuitivos como su progenitor...
ResponderEliminarUn beso y felicidades.
aiiins....
ResponderEliminareste año no llego a las fiestas del pueblo de mi madre...
(Me tendrá que cocinar aparte el pulpo!!!)
:)
Ummmm! pulpo ó fútbol....¡PULPO! me pido...muy simpática la entrada. Besos
ResponderEliminarPues el mejor homenaje que se le puede hacer al pulpo es comérselo. Eso de vivir en una pecera hasta que se muera de viejo no me parece vida.
ResponderEliminarPor cierto que fue lo que comimos ayer en casa de mi suegra, y nadie preguntó por los familiares.
Jajajajjajajaa
ResponderEliminarGenial.
Muy logrado Alís.
Besos.
Jajajajaja!!!!
ResponderEliminarQué bueno!!!
Muy ágil, para variar, muy frescos tus textos ;)
Jajajajajajajajajaja ¡Ingrata! Me has provocado un ataque de risa fatal (pero yo me lo busco por leerte en el trabajo).
ResponderEliminarJajajaja. Gracias por esta entrada, por estas carcajadas.
Besos.
jajajajaja
ResponderEliminarmuy bueno, felicitaciones
realmente muy bueno
un beso
No hay bastantes problemas en el mundo como para que la gente se preocupe por un pulpo ;(
ResponderEliminarSomos así de simples.
Ah, es que odio los deportes de pelotas ;)))
Besos pelotudos
JE JE JE Octopus to the party!!
ResponderEliminarPor Dios te prometo que ayer domingo mundial, preparé para comer "pulpo con patatines". Fue inconscientemente.
ResponderEliminarMe di cuenta cuando después de escaldarlo las tres veces de turno y dejarlo enfriar, me dispuse a trocearlo.
En la primera trinchada se me vino una sensación como de mal aguero.Como que fuese un símbolo.
Menos mal que ganamos...
Por mi conciencia, entre otras cosas ;-).
Un beso.
pd
En qué parará el caso Paul??
este animalito pasará a la historia como copito de nieve, ya veras ya.
ResponderEliminarPues vale comérselo con aceite de oliva y pimentón, Paul no va a poder contra la furia española en 2014 vaticine lo que vaticine :)
ResponderEliminarUn abrazo alegre y celebratorio, amiga
Bicos do REL
jjajaj Alís, es que se convirtió en un Dios para muchos no?
ResponderEliminarSi hubiera pronosticado que ganaba Chile o Argentina creo que pasaría lo mismo!
Si, ya se que tu corazón esta en España!
Me gustó este post, decime ahora quien no habla de este pulpo diviiiino!
Se debe cotizar en Euros todo tipo de preguntas que le querramos hacer.
Se convertirá el el pulpo adivinador?
Besos mi reina!
Bueno, ya pueden estar tranquilos: ¡el pulpo se jubiló
ResponderEliminarBesos a feira!!
Desde ahora el pulpo será mi mascota, pero no dejaré de comerlo "a feira" y si es de la pulpeira de Allariz, mejor. Hay que poner a cada uno en su sitio.
ResponderEliminarTambien me gusta el caviar y no por ello me compadezco del esturion.
Besos
Esta historia túa fíxome lembrar aquela pregunta que lle facía un amigo carniceiro a un criador vaca (rubia galega, por suposto):
ResponderEliminar- Oiches Manolo; e a ti como che parece que está mellor a vaca, asada ou en estofado?
- Homeeeee, a min a vaca paréceme que está moito mellor co boi!!!.
Bicos con picante
Pues sí señor: los gallegos andamos un poco recelosos estos días. Incluso los no futboleros como yo miramos de otro modo al cefalópodo. Menos mal que al bueno de Paul ya no le queda mucha cuerda: ahí volveremos a atacar la ración sin traumas. Una vez muerto él, qué más le da que nos comamos a sus primos.
ResponderEliminarOdio a ese pulpo imbécil. Y para colmo no es gallego. ¡Que asco!
ResponderEliminarMe lo comería hasta crudo y vivo.
Saludos.
D.L.
¡Cómo somos!,
ResponderEliminartodo lo relacionamos,
pero también nos
gusta comer bien
y no todos los pulpos
son PAUL.
De todas formas creo
que estos días estará en
todos su recuerdo.
Besiños
La verdad es que a mi desde que se acepta pulpo como animal de compañia me da mucho reparo comerlo, sobre todo antes de un partido tan trascendental como el de ayer.
ResponderEliminar¡Qué angustia!
Por un instante pensé que por haber comido pulpo llegariamos a los penalties y perderiamos la final.
¡Casi se me indigesta la comida 5 horas después!
Besos.
Lady! muchos besos y una ración de pulpito también para mí, no?
ResponderEliminarMe encanta pasar a leerte, no olvidarme de esos cajones de-sastre y desastres... Lady lo es. Un beso grande y gracias, en serio.
LADY JONES
Si bien puede haber menor mortandad con los congéneres de Paul en las tierras de Galicia ( a menor demanda menor precio y a menor precio no vale la pena andar siguiédolos para que después paguen una miseria...)creo que japoneses, norteamericanos de Hawaii e incluso portugueses han superado escrúpulos iniciales y, uniendo hambre con la rabia de no haber clasificado, dejado la estadística general de mortalidad mundial del octopus como A.P ( antes de Paul).
ResponderEliminarBien escrito, sabroso y con un sorpresivo final que arranca sonrisas.
Besos desde el frío invierno
Niña, qué salero tienes, jajaja. Siempre consigues sorprender con tus finales, y nos llevas boquiabiertos hasta desembocar en ellos.
ResponderEliminarEn cuanto a Paul, se ha convertido en una mascota, sin querer, más famosa que el Naranjito. Y sus predicciones han superado a la Bruja Lola, qué más queremos.
Y digo yo, ¿de dónde sacó la gente tanto pulpo hinchable para pasearlo el domingo en la final?
Besitos y sigue pasándolo super bien.
MENOS MAL, YO A PAUL YA LE TENGO CARIÑO.
ResponderEliminarVIVA ESPAÑA OLE OLE OLE, MIS FELICITACIONES.
MAR
Jajaja, de seguro está mascota de Nostradamus algo habrá cambiado los hábitos culinarios en Galicia, claro que de Holanda y Alemania están preguntando como cocinarlo mejor.
ResponderEliminarUn abrazo.
Pff...esperaba que me sorprendieras con un triste desenlace, pero que va, me mataste de risa cuando lei esa ultima frase.
ResponderEliminarJeje.
Adoro esto :P
Jaja, Alis, parece que el mundo se ha vuelto loco con el Pulpo, solo falta Maradona diciendo que España ha ganado por él. Has hecho un híbrido de dos cuentos: uno serio, de adultos y otro, el del final de "taraos" o del todo infantil y hasta se le puede sacar una moraleja y vender a la asociación protectora de animales o a los antitaurinos, que como les de ahora por los pulpos...
ResponderEliminarHoy dice el telediario que un pueblo de Orense quiere comprarlo por 30.000€.
Besos
Yo no soy pulpo pero puede predecir cosas, soy sabroso y tengo largos tentáculos...
ResponderEliminarSiempre suyo
Un completo gilipollas
A mi me da igual el pedigrí del pulpo en cuestión, nunca le pido el DNI, solo que esté sabroso.
ResponderEliminarEn cuanto al del mundial, ya son ganas de creer en supersticiones.
Un abrazo.
Más tarde o más temprano esta historia tenia que ver "la luz". Y, claro, se te ha ocurrido a ti.
ResponderEliminar¡Muy bien!, pero espero y deseo que no cunda el ejemplo, aunque yo debo confesar que si pienso lo que estoy comiendo, mejor no como
Bicos.
Jajaja, yo voy a seguir comiendo pulpo sin ningún remordimiento.
ResponderEliminarjajaja Mira que si se comen al Pulpo Paul ya veo a la policía deteniéndolos por crimen de un intelectual.
ResponderEliminarEl Mundo esta reloco
Besosssss
Que Galicia se prepare!!
ResponderEliminarhttp://blogs.20minutos.es/el_10_futbol/2010/07/12/el-pulpo-paul-se-jubila-con-un-100-de-aciertos-y-quiere-retirarse-en-espana/
muy divertido, la verdad es que el mundial te ha inspirado muchísimo.
ResponderEliminarbiquiños,
jajaja...me crees si te digo que me da de todo comer pulpo? jó y con lo que me gustaba!!!, ahora sí, ponme a un Holandés para que veas como me lo como entero!
ResponderEliminarUn besito cielo.
jajajaja,Buenisimo,tu relato y el pulpo en todas sus variantes,yo lo siento pero voy a seguir hincandole el diente ;)
ResponderEliminarMuacksssss
Para pescar un buen pulpo hay que ir a Cedeira en las Rías Altas.(Cuidado con el oleaje:llevar flotador) (El pulpo sale a las tres de la mañana).
ResponderEliminarPara comer Pulpo a la gallega en Santiago, hay que ir a la
Rúa da Raíña, al bar Orella.
Para beber un buen vino ir a la vinoteca O Beiro.
Saludos al Pulpo Paul !
Besos
¡Bordao! ¡Te ha quedao bordao!
ResponderEliminarAunque soy más futbolera que ´mandá hacer´, también te digo que si Málaga no estuviera tan lejos de Galicia, la otra mesa ocupada hubiera sido la mía y de mis colegas.
Que una cosa es una cosa...y otra otra juas.
Cuídate un mundo ¿Sí?
ResponderEliminarBesos y hasta pronto.
:)) jajaja a mí el pulpo regulín, pero a uno de mis hermanos le encanta! :))) biquiñosss jejejeje
ResponderEliminarJajajajaja, ¡pero si este pulpo ha llegado para quedarse!
ResponderEliminarMuchos besos, guapa :D
Ñam, ñam!!!
ResponderEliminarExcelente, Alís.
El próximo que me coma, lo bautizo.
Besos.
Jejeje.
ResponderEliminarQué rica la comida de tu tierra Alís, el pulpo a feira, el marisquito, el lacón con grelos,... Cada vez que voy a Galicia, aprovecho, jejeje.
Muchos besos
Cada vez que cocino un pulpo a la hora del ritual y llegado al momento del bautizo, le pongo nombre, siempre le llamo,Manoliño. A partir de ahora será Paul
ResponderEliminarDivertidísima entrada
Disfruta. Milu
:) "Paul a feira" con tulipanes pidió un Cristiano desquiciado y escupidor... "Paul karate-kid" reclamaban los holandeses, pero....
ResponderEliminar¿Te imaginas un pulpo bailando sevillanas? ¡la de castañuelas!
besos
Delicioso el pulpo, lo evoco y me voy cib la mente a compostela y a sus bellas calles...
ResponderEliminarBss
Excelente la historia y excelente ¨o pulpo a feira¨ y lo más importante que se disfrutara de su sabor,se llame Paul o no.
ResponderEliminarUn abrazo.
jajajaja..., qué bien relatado y qué ritmo tan de escritora vivaz has imprimido a tu post.
ResponderEliminarAlís, ..¿sabías que una cofradía de Sevilla está planteándose seriamente sacar al pulpo Pablito en un Paso de Semana Santa? Será coña, ya lo sé.., pero estos sevillanos son capaces, jajaja..
Un abrazo y hummm1, qué rico el pulpito con una camita de papas asadas cortadas en fino y con aceite del bueno y pimentón de la Vera
Jajajaja, vaya histeria con el condenado pulpo...
ResponderEliminarNi me gustaba antes ni ahora.
Imagino que tener un pulpo sabihondo es un atentado a la gastronomía :-)
ResponderEliminarYo no me he podido librar de la imagen del pulpo de La Sirenita :-) y quizá por eso no me lo puedo llevar ni a la boca
Un beso
Perdonad todos por el retraso con que respondo a los comentarios. Ya estoy de vuelta a la gélida normalidad y espero ponerme al día con las respuestas y con vuestros blogs. Paso a paso.
ResponderEliminarTaty Cascada
ResponderEliminarMientras haya gente dispuesta a creer, habrá oráculos, con forma de pulpo o cualquier otra… Besos.
Gabiprog
Si te cocinan el pulpo aparte tocarás a más ¿no? Tiene sus ventajas… Besos.
Montxu
Yo también pido pulpo, sin dudarlo. Gracias. Muxus.
Titajú
También le di unos cuantos “homenajes” en estas semanas, aunque ahora tendré que pasar meses sin probarlo, snif… Bicos.
Toro Salvaje
Verte reír es casi una novedad. Me gusta. Gracias. Besos.
Joyce
ResponderEliminarMuchas gracias. También me gusta verte reír. Besos.
CarloZ
Ya veo… muy concentrado en el trabajo, jajajaja. Gracias a ti. Besos.
Eltauromquico
Muchas gracias. Un beso.
Dani
Nos vale cualquier cosa con tal de distraernos y evadirnos de los problemas… Andarás feliz ahora que terminó el fútbol. Besos sin tentáculos.
Marieta
Jajajaja, la primera vez que leí eso de Octopus to the party (con otra serie de platos típicos traducidos) me partí de risa. Bicos.
Juncal
ResponderEliminarMe reí con tu comentario. Te imaginaba durante todo el partido (porque mira que tardó el gol) arrepintiéndote de haber cocinado pulpo, jajajaja. Menos mal… Besos
Enrojecerse
Sí, también creo que al pulpo Paul se le recordará por muuuuchos años. Sobre todo en España y en Alemania, jajaja (¿quizá también en Holanda?). Bienvenida y besos.
REL
No cantemos victoria antes de tiempo. El 2014 está aún muy lejos, aunque es cierto que los años pasan tan rápido que parecen meses… ¿será la edad? Bicos.
Para tus noches
Puestos a adorar, poco importa que sea un pulpo o un elefante, por decir algo. El caso es creer en lo increíble ¿no? Ah, y sí, se cotizó muy caro el pulpito Paul… Besos.
Jose Rasero
Por fin lo dejarán descansar. Besos picantes (por el pimentón, claro)
Albino
ResponderEliminar¿Ya aceptas pulpo como animal de compañía? Muchos han decidido que sí. Por supuesto, lo mejor es comérselo. Uhmmm, qué bueno está. Bicos.
Chousa da Alcandra
Dende logo si lle preguntan á vaca, estou segura de que diría o mesmo que Manolo. Eu, sin ser vaca, tamén penso que así estase mellor. Bicos lóxicos.
Paseante
Y yo que me comí estas semanas varias raciones de pulpo sin ningún trauma… aunque admito que me acordé de Paul, sí. Besos.
Delfín Loco
Supongo que lo de comérselo crudo y vivo es por tu parte de loco… ¿o será por la de delfín? ¿qué comen los delfines? (ay, qué ignorante soy). Besos.
Marisa
Es inevitable relacionarlo ¿verdad? De todos modos, el asunto fue curioso. De eso no hay duda. Bicos.
Nacho
ResponderEliminarSi con el comentario de Juncal me reí, al leer el tuyo me partí… ¿Lo comentasteis o los dos visteis el partido pensando en el pulpo que os comisteis en silencio? Jajajajaja Besos
Lady Jones
A ver si un año de éstos compartimos una ración de pulpo o de lo que sea. Intuyo risas y mucha conversación. A mí me encanta leerte y verte por aquí. Cuando no estás te echo de menos, pero tranquila, tú con tus tiempos… que yo siempre estaré. Besos.
Rudy
Pues deberían haber abaratado el precio del pulpo, pero te diré que las raciones siguen tan caras como siempre. Aunque también es cierto que lo merecen. Gracias por los elogios. Besitos (pronto en directo)
Mercedes
Hablando de mascotas, de Naranjito… Creo que si se hace una encuesta sobre cuál fue la mascota del Mundial de Suráfrica, la mayoría no sabría responder. Entre las vuvuzelas y el pulpo, el pobre leoncito (que no sé ni cómo se llama) pasó totalmente desapercibido. Gracias. Besos.
Mar
En España también se le tiene cariño, jajajaja. Besos.
Luis
ResponderEliminarPues si alemanes y holandeses quieren aprender a cocinar bien el pulpo, tendrán que ir a Galicia… qué rico se hace en mi tierra, uhmmm. Un abrazo.
Esme
Prefiero provocarte risas que lágrimas, pero te advierto de que no siempre será así. Gracias. Besos.
Antonio Misas
Creo que fue Paul el que se negó a ir a ese pueblo de Ourense (O Carballiño) por mucho que pagaran. Allí es donde mejor se cocina el pulpo. Lo del cuento híbrido ¿será porque me gusta el mestizaje? ¿o porque mi madurez flaquea a menudo? Gracias, Antonio. Besos.
Sr. CG
Entonces habrá que cocinarlo como a un pulpo. ¿Sabía ya que primero hay que golpearlo y luego escaldarlo tres veces (algunos dicen cinco y otros siete)? ¿Sigue pareciéndose a un pulpo? Un beso.
Nómada planetario
Pues haces como yo, con tal de que esté bueno, no hago distingos sociales. Me refiero al pulpo, claro, jajaja. Besos.
Fonsilleda
ResponderEliminarCuando tenemos mucha información sobre lo que comemos se nos quita el hambre, eso es cierto. Estoy pensando que no me vendría mal informarme más, a ver si pierdo los kilos que me sobran, jajaja. Bicos.
Claudia
Haces bien. Yo tampoco tengo remordimientos. Besos.
MarianGardi
¿Intelectual? Yo al pulpo Paul lo veo más parecido a Rappel, o a Aramis Fuster, o a la bruja Lola… jajajaja. Besos.
Aldabra
Es que cualquier acontecimiento que tenga a todo el mundo pendiente de él inspira muchas historias… Bicos.
Zayi
Pues cuidado con los holandeses, que pueden resultar un poco indigestos. Mejor vuelve a comer pulpo, jaja. Besitos.
Nela
ResponderEliminarGracias, niña. Yo también seguiré comiéndolo siempre que tenga ocasión. Besitos.
Lucrecia Borgia
Pues yo conozco otro sitio en Santiago que hacen un pulpo a la plancha (polbo á grella) para morirse de gusto…, pero gracias por el dato. Cuando pueda, iré. Besos.
Fiebre
Mujer, si estuviéramos en la misma pulpería, no te sentarías en otra mesa ¿no? Juntamos a tus colegas y a los míos y seguro que nos echamos unas buenas risas… Besos.
Morgana
Mi niña, me acuerdo mucho de ti. Espero que no estés muy mal. Cúidate mucho. Besos.
Plinnn…
Muy listos tus hermanos. Por ti no te preocupes, que así tocamos a más… biquiños.
Espérame en Siberia
ResponderEliminarAl menos quedará en nuestra memoria por mucho tiempo. Besos.
Eva
Elige un buen vino para bautizarlo. El estómago (el tuyo, claro) lo agradecerá, jajaja. Gracias. Besos, Eva.
Lucía
¿Por qué crees que estoy tan “hermosota”? Claro, por eso mismo, porque crecí entre mucha comida rica, jajaja. Besos.
Sabela
Curiosa costumbre la de bautizar el pulpo antes de comérselo. Y me pregunto ¿qué te habrá hecho un Manoliño? Jejeje Besitos.
De cenizas
Un pulpo bailando sevillanas no lo imagino, pero a un holandés taconeando sí. Lo vi en la final… Besos.
Bohemia
ResponderEliminarEs que el pulpo, además de estar muy rico, trae buenos recuerdos ¿verdad? Besos
Cascarilleiro
Muchas gracias. Hay que disfrutarlo siempre que se pueda. Bicos.
Iluso Luis
Vaya, muchas gracias por tus palabras. Y si sacan al pulpo Paul en Semana Santa, cuéntanoslo. Bienvenido. Besos.
El hombre de Alabama
Sí que generó locura, sí… Bienvenido. Y pruébalo más, que está muy bueno.
Alberto
Claro, si imaginamos lo que tenemos en el plato como divertidos personajes de dibujos animados no hay manera de comérselo… Besos.