Fotografía: Vlad Artazov
- ¿Recuerdas nuestras conversaciones en la escalera?
- Recuerdo que siempre te gustaron las escaleras, que nos sentábamos en ellas para hablar, pero no qué decíamos.
- ¿Nada de nada?
- No.
- ¿Cómo es posible que no recuerdes nada? ¡¡Pasábamos horas así!!
- Sí, eso sí lo recuerdo. Y también que parecían minutos, incluso segundos. Pero no me pidas que repita una sola de las charlas que tuvimos, porque no podré hacerlo.
- ¡Qué desilusión! Creía que esos momentos eran importantes para ti.
- Y lo eran. Lo más importante, porque me permitían estar contigo. Las palabras sólo eran la excusa, el alimento de mis sentimientos.
- ¿Nos sentamos en la escalera y conversamos?
Sí, había una escalera de piedra, ancha y antigua, entrañable y acogedora para los niños que fuimos en la Noia de mis abuelos...La visito cada vez que vuelvo a la ciudad. Lo mismo que la gran Alameda, el palco de la música, los bancos de piedra con esas vetas de líquenes amarillas… Los setos de hojas pequeñas y olorosas, de las que no fui consciente entonces pero cuyo olor percibí paseando, muchos años después, por la Plaza de España, en Madrid...
ResponderEliminarSí, había una escalera…
Abrazos Alís. Un regalo que recuerdes hoy aquel ayer!
Dos puntos de vista sobre un mismo hecho.
ResponderEliminarLa conversación podía ser la excusa o el contenido.
A mí me gusta que hablen los ojos, las manos y la piel.
De las palabras no suelo fiarme mucho, son interpretables y cada uno las usa de forma diferente.
Besos.
Estoy de acuerdo con Toro, además, si el protagonista es gallego y se sitúa en una escalera, no sabes si sube o si baja. Mejor que hablen los ojos y las manos.
ResponderEliminarUn beso.
Cada cual es cada quien y ...
ResponderEliminarEspera, no. Cada quien es cada cual pero puestos a escoger hay quien prefiere las voces del corazón antes que el diccionario ...
Cada uno es como es pero parece claro que esas escaleras fueron de subida* para ambos.
Grata lectura, por cierto.
Un beso
Me hace recordar las charlas en la esquina, con la compañera del instituto. En esa esquina nos despedimos, sí, pero tras la menos dos horas de más charla. No recuerdo de qué hablábamos, eso seguro.
ResponderEliminarUn abrazo y feliz jueves
Feliz año 2019... te deseo lo mejor de los éxitos para ti y los tuyos.
ResponderEliminarSaludos fraternos
Abrazos
Es curioso, todos tenemos recuerdos de charlas interminables, pero no sabríamos reproducirlas.
ResponderEliminarMaravilloso post Alis. :)
Besos.
Viajar al olvido para rememorar momentos fantásticos... yo que todo lo olvido, me gustaría volver atrás en el tiempo y revivir tantas cosas... me he puesto melancólica. :) un beso grande.
ResponderEliminarEn esta conversación, yo sería la persona que lo recuerda todo. Pero, aunque tiendo a enfurruñarme cuando el otro no recuerda, tu relato de hoy me da otra perspectiva. Gracias por estos pedacitos de sabiduría.
ResponderEliminarAbrazos
Pat
El silencio del ruido blanco que hace la voz y que acompaña al sentir el amor por esa persona. No importa lo que diga, la verdad, es el momento.
ResponderEliminarLa de horas que se puede tirar uno mirando unos labios sin saber lo que hablan. Solo por el gusto de mirar, de verlos sonreir, de encontrar esa promesa de un beso, ya sea en una escalera o en un banco frío del parque.
ResponderEliminar¿Qué lenguaje preferimos?, cada persona tiene su apreciación y gusto. Yo prefiero el no verbal, aquel que se visualiza en un gesto, en la postura del cuerpo, en los ojos y sobretodo en el lenguaje cálido de las manos. El lenguaje del verbo que se expresa en las palabras nacen bajo el ingenio e inventiva de su creador y, a veces, no son verdaderas. Mucho bla, bla se olvida; pero una mirada especial y un beso no se olvidan jamás.
ResponderEliminarAbrazos Alí y feliz inicio de año.
Bonito recordar el momento, las cosas vividas, el sentir de aquel instante..las palabras, se las lleva el viento, saludos amiga.
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ResponderEliminarErnesto: Un regalo que tú compartas ese recuerdo. Muchas gracias. Un abrazo
Toro Salvaje: Las palabras aisladas de los ojos y la piel pierden mucho. Por eso se producen tantos desencuentros en las comunicaciones en las redes. Leemos (interpretamos, como tú dices) lo que creemos, no necesariamente lo que dicen quien nos habla. Un beso
Ilduara: Escribiendo yo el relato el protagonista ya tiene mucho de gallego, jajaja. Un beso
ResponderEliminarJuncal: Las complicaciones llegan cuando cada uno elige un lenguaje diferente y el otro no lo tiene en cuenta. Gracias. Un beso
Albada Dos: La compañía suele ser lo más importante de una conversación.Gracias por compartir ese recuerdo. Un abrazo
Aapayés: Adolfo, qué alegría verte por aquí. Muy feliz 2019 también para ti. Abrazos
ResponderEliminarAlfred: Si pienso en mis recuerdos, tiene que ver con momentos felices, ésos en los que lo más importante es con quién estaba. Muchas gracias. Besos
Laura: Supongo que es muy buena señal tener muchos momentos que quisiéramos revivir (también me ocurre). Significa que lo que vivimos vale la pena. Un beso grande
Madrilenials: Siempre ayuda ponernos en el lugar del otro. Facilita las cosas. Un beso
ResponderEliminarCristal: Y la vida se construye con momentos. Bienvenid@.
Bubo: Y la de horas que gastamos soñando con volver a verlos. Entiendo que cuando dices "la de horas que se puede tirar uno..." lo dices por ti. Un beso
ResponderEliminarTaty Cascada: ¿Y me pregunto por qué tenemos que elegir? Las palabras y los gestos se acompañan y se complementan. Creo que el cuerpo es más sincero con las emociones, pero cuando cuerpo, emociones y palabras van juntas la conexión puede ser más profunda. Un beso. Y feliz 2019!!!
Sandra Figueroa: Cómo me gusta leer que habéis recordado vuestros propios momentos. Es uno de los placeres de escribir. Un abrazo
A mí me gustan por igual la palabra y el lenguaje visual.
ResponderEliminarEl recuerdo no conoce lugares ni tiempo, es travieso, y elige aquello que la memoria le brinda sin pensar...
Me gustó mucho esa escalera ;)
Besos,Alís.
ResponderEliminarLa Zarzamora: Imaginaba que tu amor por las palabras al menos igualaba al que sientes por lo visual. Tu blog es buen ejemplo de ello. A mi me cuesta separarlos. En cuanto a la memoria... ¡es tan caprichosa! Gracias. Besos, Eva