Lábil. Es la primera palabra que me describe en esta convalecencia que deseaba y temía a la vez. Este descanso ansiado, obligado y respetado, y sobre todo necesitado, que sería y es ineludible. Este espacio para estar conmigo, sin muchas posibilidades de huida, y una fragilidad inesperada.
Para asegurarme de estar diciendo lo que sentía busqué lábil en el diccionario y encontré dos acepciones. Que se desliza o resbala fácilmente. Lo hago. Me diluyo en esta quietud dinámica, en que mi cuerpo se va reasentando, acostumbrando a sus pérdidas, y mi alma lidia con el silencio que no llega y con la calma advenediza. Me deslizo, me resbalo, me diluyo y me dejo caer por este largo tobogán de emociones y pensamientos.
Que cambia o es poco estable o seguro. Nada nuevo en el horizonte, ni a este lado de la línea. Las variaciones del ánimo bloquean cualquier resquicio de estabilidad o seguridad, o las multiplican. Tantas estabilidades como posiciones pueda adoptar, tantas seguridades como segundos tiene el día, restando los que el sueño roba como Robin Hood, quitándole el tiempo a mi yo dispersa para entregárselo a mi yo escasa de anhelos y ensoñación.
Lábil. Es la primera palabra para describirme en esta convalecencia que me enfrenta al miedo y la tentación, a partes iguales, a la vagancia. En este parón aparente, lleno de movimiento interior.
Por ahora, lábil. Estoy a sólo una “a” de que se transforme en labial y estaré lista.
Paso a leerte y me resbalo en tus letras ....Te deseo lo mejor en esa convalecencia. Animo amiga. Lábil es una palabra que nunca había escuchado. Saludos y fuerte abrazo a la distancia amiga.
ResponderEliminarImportante que la convalecencia sea tranquila, que no corras, que la paciencia no se te agote.
ResponderEliminarLábil ahora, tal vez frágil, pero pronto labial o vigorosa. Un abrazo y que te repongas pronto
Es bonita esa palabra.
ResponderEliminarAunque más bonita es "tentación".
A que si?
Besos.
No conocía la palabra, agradezco la lección y espero que venga rápido ese siguiente paso.
ResponderEliminarBesos.
Impecable prosa, Alís, da para detenerse casi que en cualquier frase, para infinidad de relecturas, sustanciosa prosa, diría, tus sentidos detectan a la perfección, como en un angélico estado... Me recordó también, obvio, aquel poema de Verlaine, Lasitud, y aquellos versos con que solía inspirarlo Rimbaud. Te felicito realmente.
ResponderEliminarAbrazo inmenso.
La hábil Alís convaleciente con valiente ánimo con todo el tiempo por delante.:))
ResponderEliminarBss
En momentos bajos es cuando el color de un buen labial se la juega. ;)
ResponderEliminarSé lo que es sentirse lábil, pasearse por la inestabilidad emocional, convalecer horas y desgranar años de tristeza, un hijo fue el único nexo que me llevaba a la vida.
Un beso.
A veces el estar en descansos obligados, nos permite escucharnos y descubrir nuevos caminos que nos llevan a un crecimiento interior. Un abrazo.
ResponderEliminarEstoy de acuerdo con Bienaventurada. Un momento de reposo viene bien para hacer introspección, descansar y asimilar todos los acontecimientos/eventos que han llenado nuestros días y horas como un torbellino, y sobre los que no tuvimos tiempo de plantearnos.
ResponderEliminarEspero que la operación no haya sido nada grave. Leí por ahí que no lo era. Pero aún así, cuídate mucho Alís. Y descansa (jjj parezco una madre!)
Te mando un abrazo maternal,
Pat
A por esa a final!!
ResponderEliminarRecuperáte pronto.
Saludos
Tu labia... es lábil, con labial o sin...
ResponderEliminarCuídate mucho, labialmente labiando :)
Un beso, sin labial;) de labio a verso.
Eres una crack.
Abrazo!!
Nunca te acostarás sin aprender algo nuevo ( ahora soy yo la que trae aquí a mi madre) y tu me has enseñado a deslizarme por tus letras.
ResponderEliminarPoco a poco Alis, tomate un merecido descanso y vuelve pronto con todas esas ganas (que gastas):) besazo enorme.
ResponderEliminarSandra Figueroa: Estoy animada, de verdad. Y entiendo que lleva su tiempo. Gracias! Un abrazo
Albada Dos: Todavía algo lábil, pero hoy me he puesto labial ¡rojo intenso! Paso a paso. Un abrazo
Toro Salvaje: Tienes muy buen gusto eligiendo palabras, así que estoy de acuerdo contigo (no te acostumbres). ;-)) Besos
ResponderEliminarAlfred: Encantada de presentarte esta palabra! Gracias. Besos
Carlos Perrotti: Wow! No sé qué decirte aparte de un enorme gracias. Y darte un abrazo inmenso.
De barro y luz: Me gusta cuando juegas con las palabras. ;-) Besos
ResponderEliminarIlduara: Veo que también sabes de elegir labiales. Me alegra. Un beso
Bienaventurada: Nos lo permite y nos obliga a hacerlo, en cierto modo, y está bien. El cuerpo nunca miente, así que mejor hacerle caso. Bienvenida. Un abrazo
Madrilenials: Ves? Finalmente acabo haciendo balances, jajaja. No ha sido grave, pero no fue una cirugía menor. Con tu comentario me sentí muy cuidada, así que gracias. Te faltó decirme que me pusiera la rebequita, jeje. Un abrazo enorme
ResponderEliminaralasdemariposa: Es la primera letra del abecedario, así que la considero accesible, jaja. Gracias. Un abrazo
La Zarzamora: Qué regalo ese baile con palabras! Gracias. Besos, Eva
Laura: Como empecemos a pagar a nuestras madres los derechos por nuestros comentarios nos arruinamos. Bueno, vale, yo me arruino, jajaja. Poco a poco voy, y disfrutándolo. Un beso enorme
El momento parece superado.
ResponderEliminarDe nuevo otro!
Chao.
ResponderEliminarErnesto: Ya usé labial, así que lo doy por superado (aunque siempre aparecen momentos para sentirme hábil). Qué bueno volver a verte por aquí! Un abrazo