- Gracias.
- ¿Por qué?
- Por darme espacio para ser.
Él la besó en la frente.
- Yo no he hecho nada, ni podría. Tú eres quien debe darse el espacio para ser.
Fue Laura quien rompió el silencio, ése que se instala cuando dos cuerpos acaban de decirse todo lo que puede decirse a alguien a quien amas, cuando llega la pausa necesaria para que las emociones plieguen sus alas y tomen tierra, cuerpo y alma. Laura rompió el silencio, pero su voz no sonó a interrupción.
Fernando se había acostumbrado a que eran esos espacios de silencio en los que Laura contaba más, se abría más, se mostraba y entregaba más. Y él se aseguraba de estar presente siempre que ella necesitaba compartirle otro jirón de su esencia. La escuchaba, la abrazaba y callaba. Se guardaba sus propios anhelos. Esta vez decidió hablar:
- Gracias.
- ¿Por qué?
- Por darme un espacio en que soñar.
Ella sonrió.
- Yo no he hecho nada, ni podría. Tú eres quien debe darse el espacio para soñar.
El silencio habría regresado si no lo hubieran llenado un suspiro compartido y los latidos de sus corazones al recibir y acoger un sentimiento nuevo.
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Por lo que leo sólo conoces hombres maravillosos. ;)
ResponderEliminarMe gustan tus relatos tienen ese toque de ternura exquisita que conquista el corazón, de autenticidad.
Es tan fácil el respeto en la pareja que cuesta entender por qué nos complicamos tanto.
Un besazo.
P.D:
¿Probaste a escribir poesía? Creo que serías muy buena.
Tal vez él habría contestado " touché " de no ser por el impás del punto. O quizás una sonrisa planease en su rostro mientras flotaba retrasando el aterrizaje ... y es que el alma, en su levedad, tarda más en posarse :-)
ResponderEliminarUn beso
Sí, como dice Ilduara solo pareces conocer hombres maravillosos jajajjajajaa... Lo que vendría a significar que, erizo puede, pero debes tener encantos ocultos que los atrae.
ResponderEliminarTernura y autenticidad también parecen primar en ti... (Tal vez debieras ir dejando eso de "púas" y "autolimitación", y centrarte en todo lo positivo que hay, eres y la vida/el "cielo" está deseando compartir/cuidarte)
Me llama la atención las palabras: respeto en la pareja... Suenan muy bien pero, tengo la impresión de que si bien lo anhelamos, dar y recibir, una de las partes siempre queda algo más limitada.
"El alma en su levedad"... Hoy parece que todo el mundo está inspirado :))))
Abrazos a todas.
Oigo violines leyéndote.
ResponderEliminar:P
Besos.
Si no hay espacios, sean ganados o concedidos, llegará la asfixia.
ResponderEliminarBss
Pues yo en esta pareja, me siento más Fernando que Laura... (fíjate que cosas) ...siempre queriendo rescatar a quien no quiere ser rescatada... al menos, yo así los veo...pero puede que me equivoque. Un beso muy grande bonita.
ResponderEliminarY así, sin hacer nada, se lo dijeron todo...
ResponderEliminarBesos, Alís.
ResponderEliminarIlduara: O al menos los imagino, jajaja. Tus palabras me sonrojan. Gracias. Un beso grande
Juncal: E incluso todas las anteriores ;-). El alma lo envuelve todo. Besos.
Ernesto: Conocer hombres maravillosos no significa que todos lo sean, jajaja. ¿De qué sirven los encantos si están ocultos? Un abrazo
ResponderEliminarToro Salvaje: Espero que te gusten los violines... ;-), Besos
De barro y luz: Muy cierto. Y la asfixia mata. Besos
ResponderEliminarLaura: ¿Sabes que a ratos también me siento Fernando? Eso sí, yo creo que Laura está deseando ser rescatada, aunque le asuste. Beso grande
La Zarzamora: No hace falta hablar mucho para decirlo todo. Los cuerpos hablan más y no mienten. Besos.