Si no doliera aún tu voz podría escuchar una canción entera sin acordarme de ti. Sin imaginarte siquiera. Liberada al fin de este sinsentido en que se convirtió todo. Y bailaría esta danza que se está gestando en mí. Sensual, libre, firme y armoniosa. Descansaría después en la brisa que abrió la ventana cuando cerraste la puerta (detrás de ti).
Si no doliera aún tu silencio podría llenarlo de nuevos colores (ya empecé). Vestir estas paredes de todo aquello que me hace creer todavía, salpicar de lo viejo y lo nuevo estos muros que me recuerdan que estoy en construcción. Y tirar a la basura todo lo que ya no sirve, ni aporta valor. Si acaso para reciclaje. Tal vez alguien pueda sacar(te)le el brillo que yo no supe.
Si no doliera aún esta distancia podría dejar de calcular el tiempo entre latido y latido cuando estás cerca, como quien cuenta los segundos desde el relámpago hasta el trueno para medir a qué distancia está la tormenta. Estúpido cómputo, cuando hace tiempo que tengo evidencias de que la tempestad soy yo. Y mis circunstancias. Y este cielo plomizo que cabalga mis hombros.
Si no doliera aún esta bruma podría distinguir de qué material están hechos los hilos que no nos permiten alejarnos (más de la cuenta). Y diluirlos, sin traumas. Con el flujo y el reflujo de esta energía que me posee, a veces fuego, a veces agua, a veces viento…
Si no dolieras aún…
Querida Alís,
ResponderEliminar¡cuánto dolor desprende tu texto!
Aunque no te conozco, expresar el dolor ayuda en cierta medida a desprenderse de él algo, aunque sea una pequeña cantidad.
Y por supuesto, aceptar tu realidad, tus circunstancias y hacer lo posible para que el dolor sentido por un amor no correspondido se convierta en amor por el presente y amar el presente. Y con dolor no se puede amar. Hasta para amarte a ti misma has de dejar el dolor. No se puede amar y recibir amor con dolor.
Permite a tu corazón el amor. Y es el primer lugar que has de cuidar. Escucha latir tu corazón, escucha la vida y ... vívela.
Gracias por tu compañía y por compartir este texto que espero te haya ayudado a estar mejor.
Saludos.
Muchas gracias, Rosa Mª. Si bien es cierto que a veces uso el blog para desahogar y ahí aparecen textos sobre lo que me está ocurriendo, la mayoría de mis textos son "ficción", o recreo una o varias emociones... No sé bien cómo explicarlo. Pero tranquila, sin estar bien, tampoco estoy mal (como todos en estos tiempos, supongo). Y en este texto en particular tomo dolorES que he conocido para crear, simplemente. No sé bien por qué, pero me gusta más o me resulta más fácil escribir sobre desamor que sobre amor, sobre tristeza que sobre alegría... y eso no quiere decir que me pase el día llorando. También río, juego, amo y soy amada... En fin, la vida misma, con sus luces y sus sombras.
EliminarMuchas gracias por tu comentario y por tu preocupación.
Un abrazo
Un texto doloroso. Alis tus letras a mi alma hacen suspirar. Hay recuerdos que duelen amiga. Saludos y te mando un abrazo.
ResponderEliminarSandra, los aprendizajes transformadores suelen ser dolorosos, si no, no hay movimiento.
EliminarMuchas gracias. Espero no haberte contagiado el dolor
Un abrazo grande
Con el tiempo podrás ver la maravilla que ese dolor de ahora, dibujó sobre el papel. Un texto magnífico.
ResponderEliminarY quizás, es que hay cosas que no pueden relucir por más que le pasemos un paño, no?
la tempestad es bella, aunque pueda darnos miedo.
Un abrazo que te llegue suave y cálido.
Carmela, este dolor es de ahora y fue de antes. Es un dolor conocido y, por lo tanto, sé que pasa. Pero trae tanta inspiración consigo que no lo quiero soltar sin aprovecharlo antes ¿seré masoca? jajaja
EliminarMuchas gracias. (Me encantan las tormentas! Y los terremotos, y la lluvia, y los cielos grises...)
Un besazo
como mutarà esto que sentís en un futuro no? sera algo dulce o semi-amargo? que se supera es cierto aunque queden secuelas...
ResponderEliminary la esperanza de algo mejor todavía... eso es también cierto... besos melancólicos!
JLO, supongo que toda experiencia a futuro deja un poso de dulce y agraz, y cada vez que la recordamos elegimos mirarlo desde un lugar o el otro. Así vamos reinterpretando nuestra historia para ir adaptándonos y seguir creciendo. Y mientras ocurre, "jugar" con ella. Y sentir, claro.
EliminarTengo toda la esperanza en que vendrán tiempos mejores.
Besos
Con el flujo y el reflujo de esta energía que me posee, a veces fuego, a veces agua, a veces viento…
ResponderEliminarVaya! Silenciaste el elemento tierra que simboliza todo aquello que soporta nuestra existencia y todo aquello que queremos lograr en nuestra vida.
😘Bicos (con la "s" de muchoS y largoS)
Noxeus, leí tu comentario y me sonreí. Así salió sin pensar siquiera en los elementos. Al releerlo, me di cuenta de que lo eran y que faltaba tierra. Y estuve a punto de añadirlo. Estuve un rato poniendo y sacando. Finalmente opté por no hacerlo:
Eliminar1 porque así salió instintivamente
2 porque necesito dejar de sostener por un rato
3 por darle un descanso a la tierra, que también lo necesita
4 porque fuego, agua y viento me traen el cambio. La tierra es estabilidad, que no me sirve en este momento (sin alejarla del todo)
5 cuando lo relea en el futuro podré hacer la misma observación que tú has hecho y podré preguntarme por qué la silencié. Seguro que encontraré respuestas que ahora no hallo.
Muchas gracias, por tu lectura, por tu comentario y por tu presencia
BicoSSSSSS
Si duele tanto es porque se quiso mucho.
ResponderEliminarAmar así es una de las cosas más hermosas.
Y cuánto duele su pérdida!
Y cuánto te inspira a ti para transmitirlo tan triste como hermoso.
Un abrazo
alasdemariposa, es una de las razones por las que duele tanto, pero hay alguna más. En todo caso, como se mezclaron varias pérdidas en este texto, creo que también hablo de dolores distintos...
EliminarUn abrazo gigante
Este dolor que sientes, ese abandono, ese silencio que duele, has hecho posible un bellísimo texto, que aplaudo.
ResponderEliminarEscribes genial, amiga.
Besos.
Muchas gracias, Juan. Pese al dolor que pueda transmitir el texto, la verdad es que disfruté escribiéndolo. Y me conectó con todas esas cosas que me hacen bien, por lo que bienvenido sea.
EliminarBesos
Cuánta belleza puede generar el dolor.
ResponderEliminarBesos.
Macondo, pienso como tú. Quizás por eso mi tendencia a escribir historias y textos de desamor, de nostalgias, de imposibles, de tristezas...
EliminarTendré que incursionar en comedia...
Besos
Tanta hermosura merece seguir doliendo, no?
ResponderEliminarBesos.
Ay, Xavi, mi respuesta instintiva sería un sí gigante, pero luego me pregunto si valdrá la pena...
EliminarSé que me entiendes. ¡Gracias!
Besos
Ese tipo de dolor puede ser hasta algo tierno.
ResponderEliminarBesos.
Alfred, me gusta que lo digas, porque yo siento ternura en este texto y creo que desde ahí lo escribí. Es curioso... gracias por percibirlo
EliminarBesos
“Si no doliera aún...” ...cada uno de nosotros sabe por lo que ha pasado, cuánto duele y cómo siente todo... y siempre visto desde fuera parece más sencillo; más fácil de “arreglar”, de olvidar, de superar... Nosotras no nos conocemos tanto pero te siento cerca y algo sí puedo y quiero decirte: pasa... todo pasa. Y si quieres, cuenta conmigo en el “mientras tanto”.
ResponderEliminarBesotes que te saquen una sonrisa.
AlmaBaires, muchas gracias por tus palabras. Leyéndote también te siento cerca, y me reconozco en parte de tus textos. Y estoy segura de que también utilizas los dolores para crear (no sólo escribimos para desahogar, también funciona al revés, al menos en mi caso).
EliminarGracias por tu ofrecimiento. Lo tengo presente y nos seguimos acompañando.
Besitos
Cuando deje de doler entonces tu mente será libre y podrá seguir ese camino de sentimientos que duele y da felicidad ..Una bonita entrada llena de sensibilidad ..Un buen domingo .BESOS.
ResponderEliminarCampirela, el camino sigue. Y escribir va limpiando el polvo que se acumula en el alma.
EliminarMuchas gracias
Besitos
Ármate de valor porque has veces que no se va nunca del todo, aunque se puede vivir e incluso volver con alguna historia nueva, pero cuando pongas ciertas canciones o veas ciertas cosas siempre aparecerá el fantasma.
ResponderEliminarBeso
Lo sé, Erik. En este texto está lo reciente y lo antiguo manifestándose. Y seguramente también los dolores del futuro, porque cuando ponemos pasión e intensidad a la vida nunca salimos ilesos. Menos mal que también hay de lo otro...
EliminarBeso
Qué dolorosamente hermoso texto. Porque deje de doler, y quede en el pasado. Con tranquilidad
ResponderEliminarUn abrazo
Albada, ya está siendo un dolor que sólo viene a ratos, y al que recurro para escribir, pero que afortunadamente va dejando de estar presente en el día a día. ¡Gracias!
EliminarUn abrazo grande
Si no doliera aún...
ResponderEliminarNo escribirías esta prosa,
ni conocerías amor y desamor,
Si no doliera aún...
podrías revestir las paredes de colores,
podrías ser reina y princesa a la vez,
podrías oír y no escuchar,
podrías ser al fin y al cabo distinta...
Más quién lo sabe?
Tomamos nuestras decisiones,
construimos opiniones,
trabajamos como humanos,
sentimos nuestras emociones
Y también amamos con todas nuestras fuerzas.
Así que, amiga
que ese pasado sea fuente cristalina
de tu vida presente.
Bicos Alís.
Lo es, Joaquín Lourido. Me gusta la intensidad en cualquiera de las emociones que siento. Las miro, me sumerjo, las habito y sigo adelante, a por la siguiente... Estoy en paz también con estos dolores.
EliminarMuchas gracias
Bicos
Hay dolores que no duelen
ResponderEliminartal vez sólo hacen más fuerte
el camino, la distancia o, el futuro.
Un placer la lectura
y lindo domingo, dentro de lo que cabe.
Mil besitos.
A. Javier, incluso el dolor tiene grados e intensidades, momentos para permitírselo y momentos para evadirlo... y, de todas maneras, nos van haciendo más fuertes (ojalá no más duros).
EliminarMuchas gracias. Un placer saberte por aquí.
Besitos
Tiempo al tiempo.
ResponderEliminarDejará de doler.
Mientras llena de contenido tus días.
Toca encontrar nuevas canciones, decorar las nuevas paredes de lo que te gusta A TI.
Por las paredes empecé, guille. Mis hijas aportan el color, así que me lo facilitan. Y si algo nos trae este virus es aprender a darle tiempo al tiempo...
EliminarBesos
Todos somos tempestad en las condiciones climatológicas adecuadas de la vida, tormenta y calma, o simple brisa.
ResponderEliminarUn beso.
Amapola Azzul, somos clima variable, sujetos a las condiciones atmosféricas que nos tocan y también las que generamos... Me gustó verlo así. Gracias
EliminarBesos
Alís... qué te puedo decir?? tus palabras me llegan, me calan... hay momentos en los que se entra en bucle, en una espiral que no cesa... abandono del pensamiento, le llamo yo. Pero llega ese día, siempre llega, en que ya no duele, aunque escuece al recordar, sobre todo los días de lluvia (interna)
ResponderEliminarMil besitos con todo mi cariño y un abrazo con sonrisa, bonita ♥
Auroratris, muchas gracias por tu cercanía. Te leo y pensaba en cómo me sorprende (no sé si es la edad) que ese día en que ya no duele, que llega de manera paulatina, ya aparece antes de lo que creía. Y, cierto, a ratos regresa, pero tampoco se lo impido. Lo aprovecho para escribir...
EliminarBesitos
No duele la distancia....duele el eco envenenado de silencio..
ResponderEliminarBss
De barro y luz, duele el eco envenenado del silencio... no podría decirlo mejor. Y está en ese veneno la clave.
EliminarBesos
Me ha gustado mucho tu elegante mensaje de desamor.
ResponderEliminarUn abrazo
Muchas gracias, Steppenwolf. Era un intento de convertir en algo "bello" (ya me cuesta decirlo) algo doloroso.
EliminarBesos
Leio e releio e me perco entre a forma e o conteúdo, entre o modo de traduzir objetivamente o que se passa e a poetização do que se passa pela linguagem, pela estética, pela ficcionalização do que é dito, que não deixa de ser “real”, contudo, impregnado de conotação, da linguagem figurada, da linguagem poética, conferindo ao texto um caráter de literatura, de arte, pelo modo de transfigurar a realidade ou de representá-la. Outra vez a fronteira, para mim, entre o real e o “fictício” é muito tênue. O quanto tem de verossímil é o que conta para o leitor para aceitá-lo como verdade. Basta dizer, é o modo de dizer que seduz... Ainda bem que este vício não corrompe...
ResponderEliminarMuitos beijos,
Leia-se no último período: Basta, é o modo de dizer que seduz...
EliminarJosé Carlos Sant Anna, no es la primera vez que me hablas de ese límite diluido entre lo real y lo ficticio. Y admito que este texto es exactamente eso. ¿Tiene de real? Claro, todo o casi todo, aunque no de manera lineal. ¿Tiene de ficticio? Claro, todo o casi todo, por el modo de encadenarlo. Me gusta que al leerme "desconfíes" de lo real y que, sin dejar de lado el contenido, te fijes en la forma para regalarme comentarios tan exquisitos.
EliminarY aunque corrompiera no dejaría este vicio...
Muitos beijos
Indudablemente desde el dolor puede nacer la más absoluta belleza también. Y aquí tenemos el ejemplo, si no doliera,seguramente no habrías podido plasmar con tanto sentimiento esto que nos confiesas, que en un susurro nos dejas conocer y sentir.
ResponderEliminarMe ha gustado un montón! Un beso grande,linda!
lunaroja, supongo que lo que dices hace referencia a lo que escribimos conociendo de qué hablamos y a lo que inventamos sin tener ni idea. Este texto es de un dolor que conozco, lo he vivido en repetidas ocasiones (no hace tanto de nuevo), pero tiene también de recreación... ¿Será eso la terapia?
EliminarMuchas gracias
Besotes!
Chegados a este punto, unhas van e outras veñen. O tempo acabará poñendo todo no seu sitio, claro que entrementras o corazón dóese.
ResponderEliminarUn bico.
Ilduara, o tempo axudado por nós...
EliminarBicos, a moreas
Qué bonito texto, aunque lleno de dolor y cierta melancolía, no deja de ser muy bello.
ResponderEliminarMe encantó.
Besazo al alma desde Uruguay.
Muchas gracias, Paula Cruz Roggero. Intentar sacar belleza de los momentos más "feos" (no los considero así, pero bueno) también ayuda a superarlos.
EliminarUn besazo también para ti
Julio David, me reí con tu comentario, porque no puedo negar lo que dices. Los dolores y nostalgias nos dan tanta vida (o más) que los momentos de calma y/o felicidad.
ResponderEliminarUn abrazo
amaneceres de
ResponderEliminarceniza.
.
ártico
Eliminardespertar entre
rescoldos
y soplar
bicos
Alis,si no doliera...pero duele!!
ResponderEliminarY en el recuerdo se quedan esas sensaciones de uno y otro calibre que tanto pesan.
Me gusta esa forma de lamento ...
Besucos preciosa
Gó
Gó, no sé si sirve racionalizar el dolor, que en realidad es sufrimiento. Por una parte, supongo que sí, porque nace de cómo nos contamos las cosas. Pero, por otra... las emociones no aceptan órdenes de la mente.
EliminarMuchas gracias
Besitos
Descansaría después en la brisa que abrió la ventana cuando cerraste la puerta.
ResponderEliminar(detrás de ti) parece que todo aún duele.
El brillo te lo sacas a ti misma con estas entradas.
Reluces...aunque quizá no te des cuenta.
Un abrazo enorme preciosa.
No, Laura, no me veo mucho brillo en este tiempo. Al contrario, son semanas en que no logro despegarme de las sombras. De un modo u otro me cubren y me poseen. Y por más que comprendo que es absurdo, hay cosas que me duelen. Ya pasarán...
EliminarAbrazo grande para ti en estos días difíciles
Tan estás en construcción, Alís, como todo a tu alrededor y dentro... Recuerda, nadie se conoce porque "nadie es" sino que "va siendo", porque todos, como vos, nos estamos construyendo...
ResponderEliminarAbrazo constructivo, prolífica Alis.
Sé, Carlos Perrotti, que no soy especial, que todos nos estamos construyendo constantemente, pura impermanencia ¿no?... Pero a cada uno le pesa su hormigón. Y yo escribo sobre eso, no por ser una, sino una más.
EliminarAbrazo en construcción también
Y llega ese día en que la magia se ha operado, y aquel dolor se cubre de un manto de olvido y desmemoria...
ResponderEliminarTodo pasa.
Besos, Alís.
Eva, los tiempos más complicados son cuando olvido y memoria andan peleándose por ver con qué se queda cada uno... Cuando gana el olvido y se lo lleva todo es un alivio. Voy a alentarlo
Eliminar:)
Besos
Toda etapa tiene su momento y su proceso. Por otra parte, cada vez que veo esa foto me viene a la memoria Flashdance. Saludos.
ResponderEliminarEmilio, es que la foto es de Flashdance. Y de una escena inolvidable, creo yo.
EliminarTienes razón en lo que dice. Parte del proceso es aceptar y legitimar lo que nos pasa. A eso me ayudan mis textos. No sé si tengan más pretensión que ésa. Si además os gustan, mejor que mejor. Aunque reconozco que en algunas temporadas me pongo cansina.
Gracias por pasarte y por tus palabras
Bicos
Cúidate mucho
Algunas veces hace falta mucho tiempo para que no duela... mucho...
ResponderEliminarUn beso grande, preciosa.